El PP en el Consejo de Administración del Ente público de Castilla-La Mancha Media (CMM) ha tachado de "fraude" el premio otorgado por la Junta a la actual directora de la cadena pública, Carmen Amores, por su supuesta contribución en favor de la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.

En nota de prensa, el PP informa de que la diputada Carmen Martín fue la encargada "de desmontar el fraude" que supone la entrega del distintivo "Empresa Excelente en Igualdad" recogido por Amores el pasado 8 de mayo de manos del vicepresidente primero, José Luis Martínez Guijarro, "a una empresa que entre sus puestos directivos solo cuenta con el 30, 50% de mujeres (11 de un total de 36).

"Nos parece una auténtica vergüenza y una afrenta intolerable a otras empresas que sí luchan por la igualdad real que la señora Amores reciba un premio de una institución que nos debería representar a todos y que está siendo utilizada para pagar favores a todos los que trabajan para el régimen de Page", ha dicho Martín.

Y ha agregado que "el hecho es aún más grave porque, si se analiza el organigrama de CMM, se puede comprobar cómo en el primer nivel de responsabilidad -desde la propia dirección general del Ente hasta la dirección de Explotación y Producción- de un total de 10 puestos, solo dos están cubiertos por mujeres: el de la propia directora y el de la directora de Contenidos y Programación.

El resto, incluidos la dirección de la Radio y la de los Informativos, están todos ocupados por hombres, ha subrayado Martín.

"El colmo del sainete"

A este respecto el PP recuerda que, en la pasado reunión del Consejo de Administración de CMM, la consejera representante del PP manifestó: "esto es el colmo del sainete en el que se ha convertido la relación de Amores con Page: que le den a usted un premio por su trabajo en pro de la igualdad es de un cinismo sin límites".

Por otro lado, Martín ha calificado de "ridículas" las declaraciones que hizo la directora general de CMM en su última comparecencia en la Comisión de Control parlamentaria del Ente cuando afirmó, "sin ningún tipo de rubor, que ella tiene una brecha salarial" con respecto a su antecesor en el cargo, Ignacio Villa, "puesto que él cobraba 120.000 euros y ella 105.000".

Estas declaraciones de Amores, según Martín, "fueron motivo de sorna e indignación por parte de los sindicatos y los trabajadores de CMM que le recordaron a la directora de CMM que era una falta de respeto para aquellas mujeres que realizan trabajos en servicios subcontratados en labores de limpieza o de maquillaje y peluquería, que sólo cobran unos 400 euros al mes, o mujeres operadoras de cámara en delegaciones que cobran 700 euros al mes".