Una de las comparsas participantes en el desfile del Carnaval toledano.
El detalle más bonito del Carnaval de Toledo se vivió bajo la lluvia antes del desfile
Un intenso chaparrón obligó a retrasar 30 minutos el pasado sábado el inicio del desfile de Carnaval en la ciudad de Toledo, que finalmente pudo arrancar a las 17.30 horas. La lluvia cesó momentos antes del comienzo y permitió que el evento no solo transcurriese con seguridad, sino que fuese multitudinario.
El inoportuno aguacero pilló a descubierto a muchos de los miembros de las comparsas participantes, que se encontraban ya en el aparcamiento de la calle Coronel Baeza de la capital toledana -el punto de salida del desfile- organizándose y ultimando detalles.
Algunos pudieron resguardarse de la lluvia en bares cercanos, pero otros no tuvieron tanta suerte. Decenas de personas disfrazadas, tanto adultos como niños, acabaron empapados y los vecinos de la zona no dudaron en echarles una mano.
Tanto es así que varios propietarios de las viviendas de la calle Coronel Baeza abrieron los garajes para que los participantes en el Carnaval pudiesen ponerse a cubierto. Pero su solidaridad no se quedó ahí, sino que también les prestaron toallas y secadores para que, al menos los niños, pudiesen desfilar con la ropa en condiciones. Incluso les ofrecieron bebidas para que pudiesen entrar en calor.
Todo un detalle de estos vecinos de Toledo, que también pusieron su particular granito para que el Carnaval 2024 pudiese celebrarse con alegría en Toledo. "Participaron más comparsas que nunca, todas ellas con gran colorido, magia y bailes, y agradezco su paciencia por el retraso de media hora", ha asegurado este lunes el concejal de Festejos, José Vicente García-Toledano.
A los cuatro grupos que tuvieron que retirarse y no pudieron participar como consecuencia de la lluvia les ha recordado que no perderán la ayuda económica del Ayuntamiento y les ha pedido que "se animen y el próximo año participen de nuevo en el Carnaval de Toledo".
