Una de las situaciones más angustiosas que puede sufrir una persona es la de atragantarse porque algo de comida, agua o saliva se le obstruye en la garganta, siente una terrible sensación de ahogo y no puede respirar. Es algo que ha sufrido casi todo el mundo en algún momento de su vida y hay personas a las que les ocurre con cierta frecuencia.

El presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha sufrido esta semana un episodio de este tipo mientras comía en un conocido restaurante de Toledo con varias personas, entre ellas su jefe de prensa, Jorge Fraile. En un momento dado, Núñez sintió que se atragantaba e intentó expulsar lo que tenía en la garganta tosiendo, pero no lo conseguía mientras hacía esfuerzos por respirar.

Los acompañantes se percataron de inmediato de la gravedad de la situación y se dispusieron a ayudarle. Pero fue su jefe de prensa el que lo hizo de manera más decidida, rápida y eficaz mediante la conocida como "maniobra de Heimlich", que consiste en situarse detrás del afectado, rodearle el abdomen con los brazos y aplicar impulsos firmes hacia dentro y hacia arriba en intervalos. En breves segundos, tras varios intentos y gracias a dicha maniobra, Núñez expulsó el pequeño resto de comida que se le había quedado dentro y recobró la respiración con toda normalidad, continuando la conversación con sus compañeros de mesa como si no hubiera pasado nada.

Las personas de las mesas cercanas que se percataron de lo que ocurría también se acercaron para prestar su ayuda, pero por fortuna no fue necesaria gracias a la oportuna y decidida intervención de Jorge Fraile, que como pudo comprobarse se ocupa y se preocupa de velar por algo más que la salud mediática de su jefe. Y de manera extraordinaria en este caso.