El CF Talavera salió derrotado en el último partido del año en El Prado ante un Sanluqueño que acertó con las dos ocasiones que tuvo y que se apoyó en Isma Gil para impedir la reacción cerámica. Y es que los blanquiazules llevaron el peso del encuentro durante la mayor parte del tiempo, pero no les bastó para al menos sumar en un partido en el que la falta de puntería les acabó penalizando.

Comenzó el partido el CF Talavera con un buen tono y poniendo pronto en dificultades a la defensa del Sanluqueño. De hecho, no se había cumplido el primer minuto de juego cuando Zamorano probaba suerte desde la frontal con un buen lanzamiento que obligaba a intervenir al cancerbero Isma Gil. El dominio de los locales era muy claro y las situaciones de peligro iban poco a poco cayendo, aunque faltaba más efectividad en el remate para poder decantar la balanza de su lado.

Sin embargo, a pesar de estar bien plantado sobre el terreno de juego, el cuadro de Fran Alcoy se llevó un mazazo en el minuto 20. En una jugada por el centro fue avanzando líneas el Sanluqueño hasta filtrar un pase al interior del área que cazó Dani guti para anotar con tranquilidad frente a Barbero. Las cosas se le pusieron muy en contra a un Talavera que, en cualquier caso, trató de reaccionar de manera inmediata. Fue en una acción de Christian que acabó con un centro al área que Samu Corral cabeceó fuera por muy poco.

A pesar de que el Talavera seguía dando mejores sensaciones que el rival, le hizo falta muy poco al Sanluqueño para abrir brecha en el marcador antes del descanso. Luis Madrigal, en carrera y desde la frontal del área, se sacó un poderoso lanzamiento que sorprendió a Barbero con el efecto y acabó en la red blanquiazul. Era el minuto 35 y el 0-2 era el duro marcador con el que los locales se iban a marchar al descanso.

Reacción Insuficiente

En la segunda mitad, el CF Talavera saltó al terreno de juego convencido de las opciones de remontada que tenía. Más aún cuando consiguió reducir distancias en el marcador en el primer minuto. Un saque de una falta lejana de Ángel López acabó cabeceándola a la red Samu Corral para establecer el 1-2.

El Talavera tenía tiempo para lograr al menos el empate y a ello se puso durante toda la segunda mitad. Pero a ese dominio le faltó claridad en el remate para equilibrar la contienda. El que más lo intentó sin duda fue Samu Corral, protagonista también en el minuto 49 con otro remate que salvó sobre la línea un Isma Gil que se mostró muy seguro durante todo el choque.

De hecho, el portero visitante estuvo de nuevo providencial para salvar a los suyos en una jugada en la que Expósito, dentro del área, se entretuvo demasiado a la hora de rematar. Otra vez Isma Gil tuvo que aparecer para impedir el empate de los talaveranos, deteniendo cuando prácticamente se colaba un cabezazo muy peligroso de Samu Corral. Fue la última acción de mérito para los cerámicos, que se vieron perjudicados por las interrupciones y a los que no les valió de nada el descuento de seis minutos que se decretó.