El Festival de Teatro de Almagro cierra su edición de 2025 con 74.000 asistentes y un 92 % de ocupación

El Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, que ha celebrado su cuadragésima octava edición del 3 al 27 de julio, ha bajado el telón tras recibir a más de 74.000 asistentes y con una ocupación media del 92 % en sus 103 funciones.

La directora del festival, Irene Pardo, ha cifrado el aumento de la concurrencia en un 14 % respecto a 2024, con una recaudación de 577.000 euros, un 6,5 % más que en el año anterior.

El retorno económico estimado ha alcanzado los 4,2 millones, un dato que ha celebrado que "reafirma" a este evento "como motor cultural, ciudadano y económico en el corazón de Castilla-La Mancha".

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En total, se han programado 52 espectáculos con 103 funciones, a cargo de 50 compañías, ocho de ellas internacionales, y se han desarrollado 51 actividades paralelas con 141 sesiones.

El Hospital de San Juan, uno de los espacios principales, ha rozado el lleno absoluto en todas sus representaciones.

Más de 40.500 personas han asistido a los espectáculos escénicos y más de 33.600 han participado en actividades paralelas, "consolidando un festival al que no solo se asiste, sino que se vive", según Pardo.

"El dato de ocupación habla no solo del éxito de público, sino de un vínculo sostenido en el tiempo: Almagro no convoca espectadores, construye comunidad", ha defendido.

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La Compañía Nacional de Teatro Clásico, dirigida por Laila Ripoll, ha presentado cinco producciones que han contado con una “extraordinaria acogida”, ha destacado Pardo, quien también ha celebrado que la participación de la CNTC se ha extendido también al Barroco Infantil, Almagro OFF y programas de accesibilidad.

"El Siglo de Oro late con fuerza en la creación contemporánea", ha afirmado la directora del Festival de Teatro de Almagro, quien ha destacado que este año se ha conformado un mosaico escénico multidisciplinar con teatro, música, danza, circo, instalaciones visuales y ficción sonora.

Del total de compañías programadas, el 84 % han sido nacionales, con una amplia representación de Madrid y Castilla-La Mancha, lo que, según Pardo, refuerza el arraigo local del festival sin renunciar a su proyección internacional.

Igualdad, memoria y territorio

Esta edición ha apostado por una presencia equilibrada de mujeres en dirección y autoría, entre las que ha habido 31 directoras y 32 autoras, con nombres como María Folguera, Raquel Camacho o Laura Ferrer, que han recuperado figuras del Siglo de Oro como Sor Juana, María de Zayas o Marcela Sanféis.

Se han producido dos exposiciones destacadas, una de ellas Genias, una instalación audiovisual que viajará a Montevideo en octubre, y la obra Barroco Infinito, de la ilustradora Carmen García Huerta, cuya imagen ha sido icono del festival.

Pardo ha agradecido el trabajo del equipo técnico y artístico, así como la fidelidad de un público que "abraza el festival como un acontecimiento imprescindible".

De este modo, ha subrayado que el evento "no se vive solo en los escenarios, sino en las calles, en la gastronomía y en los reencuentros que se repiten cada año".

El festival también ha estrechado lazos con instituciones como Acción Cultural Española, el Instituto de las Mujeres y diversas embajadas, fortaleciendo su carácter como "territorio simbólico" y espacio de diálogo cultural.

El Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro está impulsado por el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) del Ministerio de Cultura, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, la Diputación Provincial de Ciudad Real, el Ayuntamiento de Almagro, la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) y el Museo Nacional de Artes Escénicas (MNAE).