Clausura de la XLVI Semana Cervantina.
Campo de Criptana clausura su XLVI Semana Cervantina nombrando a su Hidalgo y Molineras de Honor
Entre los profesionales reconocidos en esta edición se encuentran Irene Villa, Isabel Gemio, Jaime Olmedo y Carmen Teresa Olmedo.
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Con un Teatro Cervantes lleno, Campo de Criptana clausuró este martes su XLVI Semana Cervantina, una tradicional cita organizada por la Asociación de Hidalgos Amigos de los Molinos y el Ayuntamiento de la localidad. El acto final estuvo marcado por el reconocimiento a personalidades que encarnan, desde sus trayectorias profesionales y humanas, el espíritu cervantino, hidalgo y molinero que define esta celebración manchega.
Al igual que en años anteriores, el cierre de esta 46 edición tuvo como eje central la entrega de distinciones. Este año, el título de 'Hidalgo de Honor' fue concedido a Jaime Olmedo, rector de la Universidad Camilo José Cela, y el de 'Molinera de Honor' fue entregado a las periodistas Irene Villa e Isabel Gemio y a la viceconsejera de Cultura de Castilla-La Mancha, Carmen Teresa Olmedo.
En su intervención, Olmedo, natural de Talavera de la Reina y reciente Hijo Predilecto de su ciudad, reflexionó sobre la diferencia entre mérito y fama, subrayando que "hay quienes tienen fama sin mérito y otros muchos que tienen mérito sin fama". Además, hizo una exaltación de la lectura, asegurando que "todo lo que soy se lo debo a los libros".
De su lado, Irene Villa, visiblemente emocionada, afirmó que pese a haber recibido muchos galardones, este le hacía especial ilusión por su simbolismo. Fue destacada como una figura que representa el espíritu de Dulcinea: fuerte, idealista y resistente. En su discurso, alertó también sobre el preocupante consumo de pornografía entre los jóvenes y reivindicó la educación como antídoto frente a la banalización de las redes sociales.
Isabel Gemio, por su parte, agradeció el reconocimiento y demostró sus grandes dotes como comunicadora durante su intervención. Afirmó seguir en activo a través de su canal de YouTube y expresó su deseo de volver algún día a la gran pantalla televisiva.
Carmen Teresa Olmedo, muy influyente en el Ayuntamiento de Campo de Criptana y en el PSOE de Ciudad Real y profundamente ligada a la vida política y cultural de la región, hizo una defensa del valor del pueblo y se mostró alineada con el presidente autonómico, Emiliano García-Page.
El acto contó también con el nombramiento de María del Carmen Lizcano como 'Socia de Honor'. Muy querida en la localidad, su reconocimiento fue uno de los momentos más cálidos de la noche.
Emotivo discurso de Miguel Ángel Mellado
Miguel Ángel Mellado, que ejerció como mantenedor de la gala, ofreció un discurso dividido en dos partes bien diferenciadas: una más ligera y otra más solemne, ambas marcadas por la influencia del Quijote y por su experiencia en el oficio periodístico.
En la primera parte, Mellado compartió con el público cómo la lectura de Don Quijote de la Mancha le ha enseñado "más que cinco años de carrera" en la Facultad de Ciencias de la Comunicación. Con humor y cercanía, reivindicó el valor formativo de la obra cervantina y aprovechó también para hacer una defensa del periodismo riguroso, afirmando que "un buen periodista debe trabajar con datos más que con opiniones, ser actual, ameno y estar siempre al servicio de la verdad".
Miguel Ángel Mellado, durante la gala.
"Hay que odiar menos y leer más"
La segunda parte de su intervención adoptó un tono más reflexivo. Ante un Teatro Cervantes con el aforo completo, Mellado hizo una emotiva alusión a la historia viva del edificio, escenario de múltiples momentos históricos. Recordó que por ese mismo teatro pasaron figuras como Azorín, autor de La ruta de Don Quijote, así como políticos como Santiago Carrillo, Primo de Rivera y el religioso Gabino Díaz Merchán, cuya historia personal quedó marcada por la Guerra Civil.
A través de estas referencias, Mellado subrayó la importancia de aprender del pasado y de mantener viva la memoria colectiva. "No debemos caer en la intransigencia ni en la polarización", afirmó. "Hay que odiar menos y leer más, sobre todo el Quijote", concluyó, cerrando su intervención con un mensaje de humanismo, tolerancia y compromiso cultural.
La Semana Cervantina de Campo de Criptana, que hace unos años reconoció también a Pedro J. Ramírez, Cruz Sánchez de Lara y Esther Esteban, cerró su 46 edición reforzando su papel como punto de encuentro entre tradición, cultura y reflexión sobre el legado universal de Miguel de Cervantes.
