La marcha de Cristiano Ronaldo del Real Madrid significó un cambio en el nuevo proyecto de Julen Lopetegui, pero con la actual plantilla y sin realizar cambios excesivos. Incluso el grupo ha intensificado sus vínculos y hay una gran unión entre jugadores. El luso no ha encontrado su lugar en Italia, donde no ha anotado y ya ha sido criticado por su rendimiento en los primeros encuentros, donde ha rematado 17 veces sin encontrar el tanto.

Con la llegada del técnico vasco el equipo merengue es diferente, gran presión tras perdida en campo rival, sacrificio de los jugadores de arriba, la liberación de Gareth Bale y el gran control de balón con un Toni Kroos como maestro de ceremonia. Tras la marcha del luso, Marco Asensio ha ocupado su sitio, y aunque no haya logrado marcar en Liga, su influencia en el terreno de juego es imprescindible. Un equipo que ha cambiado su forma de jugar tras la perdida de uno de los mejores delanteros del mundo.

En El Chiringuito se debatió sobre la nueva situación de Cristiano y como afectó al Real Madrid su marcha, a lo que Jaime Astrain afirmó que el conjunto blanco "no es ni mejor ni peor sin Cristiano pero tiene que jugar a otra cosa". Y ese cambio de estilo lo ha demostrado en las primeras jornadas, ganando de forma holgada a todos sus rivales, con los tres delanteros en un gran momento.

Cristiano Ronaldo, en el partido ante el Parma. REUTERS

La BBA ya se entiende a la perfección

La gran duda sobre quien iba a sustituir a Cristiano ha durado tan solo unos meses, ya que desde el primer momento, el entrenador vasco confió de lleno en Asensio, y el '20' está respondiendo con grandes partidos. Junto con Karim Benzema y Bale, el equipo merengue tiene uno de los mejores tridentes del mundo, con siete goles en tres jornadas de campeonato.