El gran obstáculo que tienen millones de españoles a la hora de elegir un coche eléctrico como su futura compra está, sin duda alguna, en la necesidad de recargarlos. A diferencia de las gasolineras, de las que hay muchas y de una gran variedad de marcas, los puntos de recarga públicos son mucho más difíciles de encontrar. Algo preocupante, teniendo en cuenta la prohibición de coches de combustión para el 2035, en sólo 12 años.

Incluso si la infraestructura está mejorando poco a poco, por ahora la mejor opción que tienen los consumidores es instalar su propio punto de carga en casa; algo que, evidentemente, no todo el mundo puede hacer. Es un problema bien conocido para los fabricantes, que ya han implementado métodos para encontrar puntos de carga.

Por ejemplo, Google Maps nos permite encontrar puntos de recarga de coches eléctricos, y como esa app está disponible en Android Auto, para mucha gente ha dejado de ser un problema. Tesla también tiene su propio mapa de cargadores y supercargadores. El nuevo proyecto del gobierno pretende también ayudar.

Puntos de carga para eléctricos

La semana pasada en el BOE, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico publicó el primer paso necesario para implementar una aplicación para encontrar puntos de recarga en cualquier punto de España. Este paso consiste en, primero, obtener toda la información necesaria para incluir el punto en una base de datos accesible de manera pública.

Y es que uno de los principales obstáculos a la creación de un mapa semejante está en, precisamente, recopilar todos los puntos disponibles en la red de carreteras española. Por eso, el Ministerio ha publicado la orden que define exactamente qué datos deben ser obtenidos y cómo se deben aportar.

Encontrar un punto de carga no será tan difícil como ahora

Los gestores de los puntos de recarga que sean accesibles de manera pública tendrán que informar al Ministerio de estos datos, de manera obligatoria. Entre la información se encuentran detalles básicos como la información del gestor, pero también datos que son importantes para los usuarios, y que les pueden ayudar a decidir si pueden usar el punto o no.

Por ejemplo, uno de estos datos obligatorios es el tipo de conector que usa el punto de carga, así como el tipo y el modo de carga que se pueda usar, y por supuesto, la potencia máxima. De esta manera, será posible seleccionar puntos que puedan recargar las baterías en apenas minutos, si el coche es compatible.

Otros detalles que deben ser publicados tienen que ver con el uso del punto, como el precio que se factura al consumidor por el servicio de recarga, así como el horario de apertura si el punto está situado en una zona que no es accesible las 24 horas (como por ejemplo, un supermercado o centro comercial).

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