Escena de 'Transición', con Antonio Valera en la piel de Adolfo Suárez.

Especial: Lo mejor del año

Adolfo Suárez fue un tahúr a la hora de muñir consensos. También lo ha conseguido entre los críticos de El Cultural, que han escogido 'Transición' como montaje del año, un metafórico retorno a los tiempos en que el líder de UCD se la jugaba cada día para instaurar la democracia. El texto de Salvatierra y Plou reivindica su figura al tiempo que denuncia la desmemoria. Los directores Santiago Sánchez y Carlos Martín lo convirtieron en puro teatro sobre las tablas del María Guerrero. La otras nueve obras elegidas acreditan la buena salud creativa de nuestro teatro. En su vertiente comercial y desenfadada ('El crédito'), en la institucional y pública ('El pimiento Verdi', 'La noche toledana', Montenegro...) y en la más alternativa, clave estos años para sostener el pulso de la cartelera ('El rey tuerto', 'Málaga', 'Smiley'...).

1. Transición.

Autores: Julio Salvatierra y Alfonso Plou. Directores: Santiago Sánchez y Carlos Martín. Reparto: Antonio Valero, Álvaro Lavín, Eugenio Villota... Dónde: Teatro María Guerrero.



Nació de una alianza de tres compañías, alentadas por el CDN: L'Om-Imprebís, Teatro Meridional y Teatro del Temple. Un ejemplo de sinergia en tiempos adversos que sirvió para ejercitar el recuerdo. La Transición, tan trillada por el cine y la literatura, permanecía casi inédita sobre las tablas. El montaje emplea la desmemoria forzosa de Adolfo Suárez como metáfora del olvido indifirente de los españoles. Todo ocurre en un geriátrico donde el expresidente (nunca queda claro si el de verdad o un iluminado) rememora los sobresaltos y vaivenes que mediaron entre el enterramiento del franquismo y el alumbramiento de la democracia. Con manos maestras, la obra explota el enorme potencial drámatico de aquel proceso y de su personaje estelar, que en determinado momento le espeta a Santiago Carrillo: "El político que no trata de convertir las utopías en realidades no es un político sino un traficante de ideas".



2. El pimiento Verdi

Autor y director: Albert Boadella. Reparto: José Manuel Zapata, Antoni Comas, María Rey-Joly, Elvira Sánchez... Dónde: Teatros del Canal.



Albert Boadella cogió al vuelo el bicentenario de Verdi y Wagner y se sacó de la manga una versión escénica de su rivalidad, con sus respectivas oleadas de seguidores llegando incluso a los puños en las tabernas. El fundador de Joglars hizo didactismo musical, eso sí cuajado de humor y con una intuición teatral insuperable. Son muchos años de oficio pero no deja de arriesgar y cultivar la irreverencia. Esta vez rodeado de un plantel de tenores, sopranos y barítonos de los que succionó hasta la última gota de sus capacidades interpretativas. Ópera, zarzuela, comedia del arte, puro teatro... Un cóctel no apto para mentes con los prejuicios amartillados. Ya lo advertía Boadella antes del estreno: "Talibanes, abstenerse. Se van a cabrear mucho y yo estoy encantado. A esta gente la desprecio profundamente. Lo que me gusta son las personas con mente abierta".



3. El crédito

Autor: Jordi Galcerán. Director: Gerardo Vera. Reparto: Carlos Hipólito y Luis Merlo. Dónde: Maravillas y Villarroel.



Jordi Galcerán ha vuelto a demostrar este año que le tiene cogida la medida a la comedia y a la taquilla. Este año la está reventando con El crédito, en Madrid (Maravillas) y Barcelona (Villarroel). Está en la cartelera simultáneamente en las dos ciudades. Y llenando cada día. El autor de El método Gröndholm toma de nuevo un ingrediente envenenado de la realidad cotidiana (esta vez la concesión de préstamos por las entidades bancarias) y cocina una trepidante trama, plagada de golpes de efecto que tienen al espectador abducido hasta que cae el telón. Puro Galcerán, con un pulso dramático endiablado, un humor desconcertante y una inteligencia propia de un ingeniero para rematar cada detalle de la historia. Sin mensajes cargantes: "Lo único que me planteo al escribir es ser un buen autor de teatro, nada más".



4. La noche toledana

Autor: Lope de Vega. Director: Carlos Marchena. Versión: Daniel Pérez. Reparto: Joven CNTC. Dónde: Teatro Pavón.



Gran acierto el rescate de esta pieza de Lope tan escasísimamente representada y que posee el ritmo y la gracia de sus mejores textos. Esa labor de recuperación es obligación institucional de la CNTC. Ha sido la tercera promoción de su filial juvenil la que ha levantado La noche toledana, con Carlos Marchena al frente de esta formación que en su primer montaje ha evidenciado un nivel altísimo. A buen seguro algunos de sus integrantes pasarán en el futuro a engrosar la plantilla de la primera compañía. Una versión muy ágil en la que las constantes entradas y salidas de escena de los personajes no despistan al público de la trama, tan bien arquitrabada por Marchena, que sigue abrillantando su currículo como especialista en el Siglo de Oro.



5. Els feréstecs

Autor: Carlo Goldoni. Director: Lluís Pasqual. Reparto: Laura Conejero, Jordi Bosch... Dónde: Lliure.



La sabia batuta de Lluís Pascual convirtió una comedia menor de Carlo Goldoni en teatro con mayúsculas, además de en uno de los éxitos de la temporada, ganador de cinco Premios Butaca. El tema, universal: la oposición tradición-modernidad, aliñada de guerra de sexos. El reparto prometía ya en frío, pero resultó inolvidable, como si los papeles hubieran sido cincelados para Laura Conejero, Jordi Bosch, Boris Ruiz, Andreu Benito o los más jóvenes Laura Albert y Pol López. El texto, escrito originalmente en veneciano y traducido por el propio Pasqual, era recitado siguiendo uno por uno los acentos, modismos y giros propios de las diferentes variantes dialectales del catalán. Quienes se lo perdieron pueden remediarlo a partir del 10 de abril.



6. Montenegro

Autor: Valle-Inclán. Director: Ernesto Caballero. Reparto: Ramón Barea... Dónde: CDN.



El Centro Dramático movilizó recursos para sacar adelante una ambiciosa producción en la que embarcó a un elenco de más de 20 actores. Ernesto Caballero hiló la trilogía completa con la que Valle levantó acta de la defunción del feudalismo. Más de tres horas de teatro poderoso, concebido con un inteligente sentido del equilibrio: capaz de embelesar al gran público sin defraudar a los exigentes estudiosos de la obra valleinclaniana. Ramón Barea, flamante Premio Nacional de Teatro, encarnó con potencia drámatica al feroz vinculero, por el que Valle no deja de mostrar cierta piedad. Sabe que su muerte supone un fin de race que abre la puerta a una caterva de adoradores del becerro de oro, ya sin códigos de honor limitando su voracidad. Una conexión con el presente que añadió un plus de interés al montaje.



7. El rey tuerto

Autor y Director: Marc Crehuet. Reparto: Xesc Cabot, Miki Esparbé, Alain Hernández, Ruth Llopis i Betsy Túrnez. Dónde: Sala Fly Hard / Teatro Lara / Sala Mirador.



Teatro de denuncia y reflexión, al hilo de un suceso de actualidad. Esa fue la arriesgada propuesta con que el autor y director Marc Creuhet sorprendió a todos. Uno de los personajes principales de esta comedia muy negra -pero comedia ante todo- ha perdido un ojo después de recibir el impacto de una pelota de goma lanzada por un agente antidisturbios. ¿Les suena? En la ficción escénica, ambos personajes se enfrentan de nuevo en muy diferentes circunstancias, que dan pie a unos muy brillantes diálogos. No se busca la provocación sino la reflexión. La carcajada nos lleva a formularnos la pregunta que late en el texto en todo momento: ¿Hasta dónde se manipulan los discursos más encendidos y cargados de razón? ¿Y a sus artífices?



8. Málaga

Autor: Lukas Bärfuss. Directora: Aitana Galán. Reparto: Roberto Enríquez, Ana Wagener y Críspulo Cabezas. Dónde: Teatro del Arte.



El dramaturgo suizo Lukas Barfüss, que tan encendidas discusiones genera en Europa, permanecía inédito en España. Aitana Galán lo remedió con su versión de Málaga, obra que ahonda en la recurrente la conversión de la pareja en un campo de batalla. Roberto Enríquez, Ana Wagener y Críspulo Cabezas ofrecieron un recital interpretativo. Una bajada a los infiernos del desprecio, el odio y el egoísmo. La guerra estalla cuando un padre no puede hacerse cargo de su hija el fin de semana que le corresponde. La madre ya tiene programados sus planes y no quiere modificarlos. "Lo que a Bärfuss le interesa es hablar de la responsabilidad, de cómo afrontamos la culpa por lo que hemos hecho cuando las cosas se nos van de las manos", sentencia Galán.



9. L'onada

Autor: Ignacio García May. Director: Marc Montserrat. Reparto: Boris Cartes, Eduard Farelo, Malcolm McCarthy... Dónde: Teatro Lliure.



Estamos predispuestos a ser arrastrados por los totalitarismos. Eso quiso demostrar en los años sesenta el profesor de instituto estadounidense Ron Jones al someter a sus alumnos del instituto Cubberley High School, de Palo Alto (California) a un experimento pedagógico que reproducía los prolegómenos del nazismo. Eduard Farelo se metió en la piel del cambiante (por exigencias del experimento en cuestión) personaje principal, que evoluciona de empático profesor a líder dictatorial, y que arrastra consigo a un reparto de siete magníficos jóvenes actores. El mensaje es el más terrible que ha recibido el público barcelonés en esta temporada: es mucho más fácil criticar a los regímenes totalitarios que tratar de comprender los mecanismos que los fraguaron y los armaron con el poder informe de la masas.



10. Smiley, una història d'amor

Autor y Director: Guillem Clua Reparto: Albert Triola y Rubén de Eguia. Dónde: Sala Flyhard, Lliure y Capitol.



La más alternativa de las salas alternativas acogió esta comedia romántica protagonizada por dos prototipos del mundo gay: el intelectual (un sobresaliente Albert Triola) y el adicto al gimnasio (Ramon Pujol), que tantas sorpresas había de deparar. Empezando por su colosal texto: arriesgado pero amable, clásico pero al mismo tiempo rabiosamente contemporáneo. Cargado de humanidad, ternura y comicidad nada previsibles que saben emocionar sin caer en la sensiblería. Se veía venir que el montaje reclamaría pronto más espectadores. Los tuvo en un recorrido por diversas salas barcelonesas, del Lliure al Capitol, que lo convirtieron en la gran revelación de la temporada y la consagración de su autor y director.