Image: Azucena Vieites

Image: Azucena Vieites

Exposiciones

Azucena Vieites

28 julio, 2005 02:00

Un cambio de forma, 2005

Fúcares. Conde de Xiquena, 12. Madrid. Hasta el 10 de septiembre. De 1.000 a 10.000

¿Qué se adelanta, la idea o la mano? Tal duda nos asalta al mirar la más reciente exposición de dibujos de Azucena Vieites (1967), donde la artista lleva más lejos de lo habitual en su trabajo la búsqueda de posibilidades no narrativas, explicativas o descriptivas del dibujo como único medio expresivo. La duda quizá sólo tenga como respuesta: "según". Lo cierto es que Vieites parece querer anular el poder de la imagen por sí misma (las connotaciones surgidas de enlazar sentidos a partir de una forma cerrada) para concentrarse en esa idea pura, en la esencia que se pone al alcance de la mano con el hecho en sí de deslizar el rotulador sobre el papel, o que surge a partir del dibujo abstraído de una figura o referencia visual exterior. Una idea pura que es una interferencia repentina, una línea discontinua, puntos que hay que unir y no una referencia a la realidad visible. Las series de Vieites aparecen conectadas a un agente externo y mundano que le interesa particularmente: un grupo de música pop (Feria, Les Biscuits Salés, Peaches…); un fanzine relacionado con el arte (LTTR, Arty…), un contexto ideológico (neo feminismo); o una clase de lugar (jardines y escaparates). En todos ellos la intermitencia, la fragmentación, los saltos y la autonomía de las partes del dibujo dan precisamente esa impresión de algo interferido. Por último, nos encontramos una serie llamada Iconos sin imágenes en que la artista se olvida de los elementos exteriores para reflexionar sobre cómo el ojo humano pierde capacidad de identificación del motivo a medida que se encuentra más cerca de éste. Es donde Vieites muestra más a las claras el perseguido origen de cualquier abstracción y la posibilidad universal de cualquier motivo para, una vez desprovisto de sus rasgos más anecdóticos, convertirse en icono.