Y los veinte poemas finalistas son:

Huracanblue

En el fondo cuarteado del abrazo

Oscila el puñal de la rama sedienta

Que amenaza a los cisnes varados

Saulo

Zarzas en llamas en el jardín bíblico

El sol cae de plano en el Sinaí mundano

El cactus medita su suerte.

Gabriel Pérez

La noche es un barco de esclavos

del que mi niñez salta para zambullirse

en la fotosíntesis de tus sueños.

Adán

Una paloma picotea

los pesares

de los viejos sentados en un banco

Mafaldo

Nenúfares huyen de la insolación sideral

Sueñan con nieves perpetuas andinas

La fantasía no usa cadenas.

Nocturna

Hay cenefas de oro

sobre la alfombra verde

dónde el amante espera

Marta

En la siesta de las cigarras

suave es el silencio de las sombras.

El sol sueña con otros jardines

almendra vertis

En esta casa vacía ni la luz es invitada

las bancas del parque han dado asilo

a los recuerdos.

Medea

Dorado verbo de libélulas

Prófugas de tus enraizados senos

Esperan la muerte del agua en su mutismo de hiedra.

Braulio Dahuabe

Sobre el mar de lápidas silenciosas

Se desliza el Caronte gris

De los cipreses vigilantes.

Hidalgo

Aún escucho

en las plantas que miras

las pulsaciones del paraíso.

Wong

Caminan las flores hacia la colmena.

Las hojas son las alas del aire

que la luz respira.

PeibolFeliz

Fuma el césped ebrio de celos

espera el declive del sol

la umbría mudó de hemisferio.

Carlos Rutilo

Camina la furia del tigre castaño

sobre la hierba recién peinada

donde amueblan minutos los pasos perdidos.

Pablo Cavero

Mis pies descalzos respiran la hierba

El rocío susurra tus versos ardientes

Y el sol amenaza en lontananza.

Eliseo

Qué seca es la mirada del sol.

Que beba las frescas venas de mi jardín

Y se arroje en la savia de sus perfumes.

María José Viz Blanco

Dame una tregua

para beber el paisaje

de tu jardín de madreselvas húmedas.

Tierra seca

Un café de rosas y alhelís

un banco al sol entre mimosas

Una manada de búfalos soplando.

JARDÍN 3

Canta el jilguero en el alféizar

ajeno al sendero de hormigas que rompe

la esculpida geometría del seto.

Juanjo Maíllo

Es cada gota un cielo

que el paladar bendice

los verdes sobreviven al ocre amenazante

Tema de la semana que viene: “Autobiografía”.