Maialen Chourraut, durante los entrenamientos en Tokio 2020

Maialen Chourraut, durante los entrenamientos en Tokio 2020 RFEP

Juegos Olímpicos ENTREVISTA

Maialen Chourraut: "Se vulneran nuestros derechos obligándonos a decidir entre hijos y JJOO"

Bronce en Londres 2012, Oro en Rio 2016 y entre las favoritas en Tokio 2020. Maialen Chourraut atiende a EL ESPAÑOL antes de la prueba del domingo.

24 julio, 2021 23:43

Noticias relacionadas

Maialen Chourraut (San Sebastián, 1983), no ha tenido una preparación para los Juegos Olímpicos fácil. La palista sufrió problemas físicos en 2018 y el coronavirus, aunque le dio un tiempo extra, no le ha permitido llegar en la forma en la que a ella le hubiera gustado. No ha tenido malas actuaciones en los torneos previos, pero tampoco ha conseguido una victoria que pudiera reforzar su moral. Eso sí, su experiencia en Londres y Rio le avala en Tokio 2020.

El bronce en 2012 la catapultó entre el mundo del deporte español. Remontando las aguas del canal londinense tuvo su primer gran momento en los Juegos, dando continuidad a la historia dorada del piragüismo en las citas olímpicas. Pero la vida le reservaría su gran momento en 2016. En unas condiciones que se asemejan a las de Tokio 2020, tal y como ella misma confiesa, se hizo con el oro después de tomar la gran decisión de su vida: ser madre.

Ane se ha quedado en España mientras Maialen y Xabi Etxaniz, entrenador y padre del pequeño retoño, buscan el éxito en el lejano oriente. Sí que pudo estar siendo prácticamente un bebe en Rio, pero aquí, por las restricciones que impuso la Covid-19, será imposible. Estará animando a su madre, pero esta cuestión familiar que ha puesto en perspectiva Ona Carbonell durante esta cita olímpica también tiene a Chourraut como protagonista.

Entrevista a Maialen Chourraut Juegos Olímpicos de Tokio 2020 Jose Nieto

Será una de sus grandes fuerzas para tener una buena actuación en los Juegos Olímpicos. La posibilidad de entrar en el selecto grupo de las tres medallas le da un impulso extra a esta guipuzcoana que ha hecho que el priagüismo en slalom sea visto de una manera totalmente diferente a lo que se había tenido en cuenta hasta antes de su aparición. Los éxitos de Maialen han hecho disfrutar al país en los últimos JJOO y quiere que Tokio no quede en el olvido en la que podría ser su última cita.

¿Cómo ha sido su adaptación a Tokio?

Ha sido dura. Primero está el 'jet lag', que los primeros días lo llevé bien y después me vino el bajón. Me confié (Risas). Las noches fueron un poco cortas y lo más duro ha sido hacerse al calor. Más que al ambiental, al del agua, donde competimos. Está muy muy caliente. Durante estas semanas, cada vez ha ido haciendo más calor. Al ser un circuito cerrado, ese agua se ha ido calentando más. Parece que estamos remando en un jacuzzi. Para relajarse está muy bien, pero para entrenar y pedirle rendimiento al cuerpo pues es duro.

¿Cómo les afecta ese calor?

Al hacer la bajada de minuto y medio, no nos debería de afectar. Para un entrenamiento de una hora, sí que lo notamos. El cuerpo lo nota, la musculatura también, la cabeza no funciona igual y no conseguimos hacer trayectorias tan largas. El cuerpo te pide frío. Nos hemos arreglado bien con chalecos de hielo y bebida. Por suerte ya hemos terminado los entrenamientos, nos toca hacer lo que hemos venido a hacer.

Me iré contenta a casa si veo una Maialen contundente y rápida en Tokio 2020

Calor, 'jet lag'... Son todos problemas importantes, pero quizá el más importante es estar lejos de Ane.

No ha sido sencillo. Sobre todo la preparación, pensar si estará bien, si nosotros también lo estaremos, si sufrirá o no... Pero la verdad es que los dos meses antes de venir aquí fueron estresantes. Le costó la idea de que nos íbamos a ir. Hay que tener en cuenta que en Tokio estoy yo y también su padre. Dejamos durante tres semanas a la niña a miles de kilómetros de aquí. Ella psicológicamente se preparó muy bien. Desde el primer día ha afrontado muy bien la situación y esto hace que nosotros estemos tranquilos. Esto es gracias a grandes amigos que tenemos y una gran familia que nos ayuda en todo. Ane está pasando unas vacaciones impresionantes, va de planazo en planazo y es una gozada verla cada día. Cuando se despierta te cuenta, está tranquila y es una gozada verlo.

En Rio era un poco más pequeña y allí estuvo. Ona no ha podido compartir este momento con su hija, no sé qué opina de la polémica que ha surgido en los últimos días después de decir incluso que se arrepentía un poco de haber venido.

Es una situación muy dura la de tener que separarte de tu familia para poder competir y cumplir tu sueño deportivo. Tienes que elegir entre una cosa u otra. Ya lo he comentado alguna vez: si ahora llega a ser Rio, con estas condiciones, no habría sido campeona, hubiera decidido quedarme en casa con mi hija. Yo creo que se vulneran muchos derechos, tanto de la mujer, de la familia como de los hijos. Yo creo que todo irá evolucionando y gracias a Ona que ha hecho visible esta situación se darán pasos para que mejore la situación y que futuras madres o padres no tengan que elegir. Sobre todo en edades tan tempranas, que son tan fundamentales porque se van desarrollando y que no haya ningún trauma.

Maialen Chourraut celebra su oro en Río.

Maialen Chourraut celebra su oro en Río. EFE

Bronce en Londres, oro en Rio... ¿Qué se puede esperar de Maialen en Tokio?

Vamos a ver qué pasa... He llegado lo mejor que he podido a estos Juegos. Llego con ilusión. Hemos estado en las finales de los campeonatos que he disputado. No me he llevado medalla, pero he estado cerca. Los Juegos Olímpicos es una competición muy abierta y hay mucho nivel. Es la mejor competición del mundo y todos vamos con el mismo sueño. Si tomamos la salida, es que cualquiera tiene la posibilidad de hacer algo bonito. Yo quiero verme rápida. Mi objetivo es que Maialen sea rápida desde el principio, con una buena navegación, contundente y fluida. Si veo eso, me iré contenta a casa.

¿Cuánto ha influenciado en esta Maialen todo lo vivido en este último año y medio?

Este año ha sido difícil, durillo, sobre todo por la situación mundial. Ver cómo está afectando a tantas personas este virus afecta. Yo he tenido la suerte de que he podido seguir entrenando, de que no nos haya afectado de cerca. De hecho, creo que me ha afectado positivamente en el hecho de que se haya alargado un año más la preparación porque el ciclo olímpico ha sido duro y difícil.

38 años, este ciclo olímpico ha sido más largo, el siguiente más corto, ¿van a ser sus últimos Juegos?

No lo sé. Ahora estoy en Tokio y voy a por Tokio, lo de después ya lo pensaremos. No puedo dar una respuesta.

[Más información: La guía de España en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020: calendario, horarios y opciones de medalla]