"Estoy triste... y no sé por qué; / he bebido amor / y aún tengo sed". Los versos son de Gloria Fuertes, pero ahora llevan voz y base. Elena Casanueva es Eskarnia, una rapera malagueña que hace tres años -con motivo del Festival El Mal de Tourette- se puso a escarbar en esa escritora tierna, divertida y solitaria, en esa niña grande de posguerra que no soltaba el cigarro y entendía la vida interior de las cosas pequeñas.

"Fueron los poetas Miguel Zurita y Vicente Ortiz, los organizadores del estival, quienes me plantearon escribir algo sobre ella o adaptar sus versos a mi rap. Yo no sabía nada de Gloria Fuertes, y cuando empecé a leerla la conexión vino sola", cuenta a este periódico. Bautizó el espectáculo como No se nace al nacer y celebró a Gloria antes que el calendario, que recuerda que en 2017 se cumplen cien años de su nacimiento.

Sola en la sala

Del encargo al amor: "No tiene nada que ver con la idea preconcebida que la gente tiene de ella. Eso de 'la poeta de los niños'... hay que dar con esa cara b, con esa cara oculta que es su poesía social, su poesía adulta: cruda, inteligente, con humor, llana". Golpeaba con dulzura. Soltaba sus píldoras ácidas con gesto cansado, complaciente, redondeado.

En No dejan escribir contaba, con la baba triste, qué poco interesaba entonces lo que tuviera que decir una mujer. Cuántos palos en la rueda del verbo femenino. "Trabajo en un periódico / pude ser la secretaria del jefe / y sólo soy la mujer de la limpieza. / Sé escribir, pero en mi pueblo / no dejan escribir a las mujeres. / Mi vida es sin sustancia, / no hago nada malo. / Vivo pobre. / Duermo en casa...".

Gloria Fuertes, rapera

Elena Casanueva citaba este poema en su espectáculo, que ahora recoge en el disco Sola en la sala. "Hago un recorrido a través de la vida de Gloria Fuertes y la pongo en paralelismo con la mía. Cuento cómo me ha influido su escritura, a pesar de las dificultades que tuvo para escribir. Y digo: '¿cómo coño, con eñe, pudo?', haciendo un guiño también a su poema sobre la eñe", relata. "Ella hizo algo muy potente cuando ni siquiera la dejaban escribir. Ella reivindicó su persona a través de la escritura, sin ni siquiera haber estudiado. Lo consiguió".

Casanueva cree que Gloria Fuertes hubiera sido una buena rapera: "Tenía muchas cualidades para ello. Su poesía es muy humanista, muy directa. Escribía para la gente, no para la academia

Casanueva cree que Gloria Fuertes hubiera sido una buena rapera: "Tenía muchas cualidades para ello. Su poesía es muy humanista, muy directa. Escribía para la gente, no para la academia. Creo que era una mujer entre dos mundos: por un lado se alejaba de una poesía que tuviera una estética concreta y por otro se dirigía hacia un verso más llano, entendible para el pueblo".

Eskarnia.

Intuye que viviría una dualidad entre ser poeta y ser reconocida como poeta. "Me siento un poco identificada, porque yo soy rapera pero también soy actriz, y es difícil conciliar esos dos mundos. Por ejemplo, si yo quiero hacer una obra y que los raperos vengan al teatro no lo voy a conseguir, porque no lo sienten como su espacio. Y al revés igual: los actores sienten que el rap es una esfera que no les corresponde".

Feminismo y justicia social

El tema que da nombre al disco incluye dos poemas de Gloria Fuertes, En las noches claras -"Resuelvo al problema de la soledad del ser: / invito a la luna y con mi sombra somos tres"- y No sé por qué -"Estoy sola... y no sé por qué / quisiera besar / y no sé a quién", pero la rapera cuenta que "todo el trash completo está inspirado en muchísimos poemas suyos, en palabras sueltas e incluso en la propia vida de la autora": "Yo cuando escribí ese tema pensé que lo hacía desde ella, como si me pusiera en su lugar: quise explicar cómo se sentía, de alguna forma, con respecto a la soledad, que es una temática muy recurrente en su obra".

Eskarnia, Dichosos.

Los guiños están por todas partes, como en "cazando mariposas con mi traje de torero" o "hay quien dice que soy como una cabra, lo dicen, lo repiten, ya lo creo; pero soy una cabra muy extraña que lleva una medalla y siete cuernos...". Casanueva encuentra también similitudes entre la voz subversiva de Fuertes y su propia voz.

Tiene un poema que dice 'Gracias, amor, por tu imbécil comportamiento / me hiciste saber que no era verdad eso de poesía eres tú / ¡poesía soy yo!': rompe el esquema de Bécquer

En Dichosos critica que "nos arrebatan los derechos, la sanidad, la educación, la razón, no quieren que pensemos... distraídos, imbuidos, en esta dictadura camuflada sometidos, ¡griten y hagan ruido!". Denuncia este "sistema anti-personas" y llama a los oyentes a "recuperar la dignidad que se nos roba". "El poema que introduce este tema también es de ella: dice que el pobre no tiene la culpa de ser pobre, pero el rico sí".

En cuanto a la esfera emocional, ha rescatado la parte más "feminista" de la autora". "Tiene un poema que dice 'Gracias, amor, por tu imbécil comportamiento / me hiciste saber que no era verdad eso de poesía eres tú / ¡poesía soy yo!': rompe el esquema de Bécquer de 'en mi pupila, tu pupila azul'". Fuertes no sólo escribía poesía. Quería ser poema. "Echó por tierra el amor romántico. En Desperté hago referencia a esto y digo: 'Ya no soy la mujer de tu vida, ya lo soy de la mía'".