Qué fue de Miki Molina, el ex de Lydia Bosch que tuvo un sonado y polémico 'affaire' con Ana Obregón Montaje de EL ESPAÑOL.
Qué fue de Miki Molina, el exmarido de Lydia Bosch que tuvo un sonado y controvertido 'affaire' con Ana Obregón
El actor lleva cuatro años alejado del foco mediático. Su vida actual parece ser sosegada y centrada en el trabajo y la familia.
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Miguel Ángel Molina Tejedor (61 años), más conocido como Miki Molina, lleva una larga temporada alejado de los medios. Desaparecido del mapa. Y sin dar señales de vida en los medios de comunicación. En los últimos cuatro años se ha mantenido en un perfil bajo que dista mucho de su época dorada, en la que era un rostro habitual de las revistas del corazón.
Su último tuit en X es de marzo de 2017. Y las últimas noticias que hemos tenido de él se remontan a abril de 2021. No fueron precisamente buenas. Tal y como adelantó EL ESPAÑOL, fue detenido en el aeropuerto de Ibiza por supuesta resistencia y desobediencia a la autoridad tras un altercado violento en la zona de control habilitada por la COVID. No era la primera vez que se veía envuelto en una situación complicada.
Durante décadas fue un rostro habitual de películas y programas de televisión. Ha participado en filmes como La ley del deseo (1987) a las órdenes de Pedro Almodóvar (75) o en series de gran audiencia, gracias a las cuales ha vivido grandes pasiones. Una de ellas es Lleno, por favor, donde trabajó con Lydia Bosch (61), con la que tuvo a su hija Andrea Molina (55). Otra es Ana y los siete, en cuyo periodo de grabación mantuvo un breve affaire con Ana Obregón (70). Ya no queda ni rastro de aquellos años de gloria.
Miky Molina, en un acto en Madrid, en 2019. GTRES
Y es que en su día, Miki Molina no solo acarició el éxito con las manos. Lo abrazó a tiempo completo. Porque durante muchos años el viento sopló a su favor, tanto en lo profesional como en lo sentimental.
Miembro de una de las sagas de artistas más destacadas del país, empezó a despuntar como actor desde muy joven. Ya en 1980 debutó en la película Maravillas, de Manuel Gutiérrez Aragón, en el papel de Miki. Un apodo que haría suyo y por el que se daría a conocer en el sector audiovisual.
No es de extrañar que encaminara sus primeros pasos profesionales en el mundo de la interpretación. Es el sexto de los ocho hijos del cantante y actor Antonio Molina, así que el arte lo lleva en el ADN. Casi todos sus hermanos sienten pasión por los escenarios. Ángela (69) es actriz, Paula (63) ha sido intérprete, Mónica (57) es cantante, y Noel (54) es músico y compositor.
Por la sangre de sus sobrinos también corre la vena artística. Es el caso de Olivia Molina (44) o Candela (21), la hija que tuvo su hermana Mónica con José Coronado (67) y quien, según ha revelado el actor en Telecinco, ha querido "ser cantante" y también "actriz".
Miki Molina, en la serie 'Centro Médico', de Televisión Española. TVE
Quizás emulando los pasos de su padre, Miki llegó a probar suerte como cantante, aunque sin demasiado éxito. Lo que mejor se le ha dado ha sido el teatro. Sobre las tablas ha representado todo tipo de papeles y ha demostrado ser un actor de talla. Ya en 1989 fue miembro del reparto de Así que pasen cinco años, de Federico García Lorca. Se ha metido en la piel de Hipólito, un personaje de tragedia griega que representó en el Teatro Romano de Mérida. Ha trabajado en el montaje de El cerco de Numancia, de Miguel de Cervantes, así como en La ratonera, de Agatha Christie, o en Ítaca, donde dio vida a Ulises.
En el mundo del teatro se ha atrevido a tocar otros palos, como la producción. Una faceta que desarrolló en la obra Tío Bob, de Austin Pendleton. También ha ejercido como director: en 2012 dirigió La última luz del día con la compañía Sa Penya Escénica.
Hace siete años se lanzó como director de cine en su primera película, titulada Un tiempo precioso (2018). En ella incluyó canciones de su padre. Sus trabajos cinematográficos más recientes son Laberinto de sombras (2024), de Alfredo Contreras, o Gina (2023), de José Durán. En televisión, sus últimas colaboraciones han sido en Veneno (2020), de Atresplayer, y Centro médico, emitida en La1 de Televisión Española.
Igual de intensa que su carrera ha sido su vida sentimental. Tiene cuatro hijos de tres mujeres distintas: Andrea, nacida de su relación con Lydia Bosch; Clara y Adrián, nacidos de su relación con la modelo Kirsa van Pallandt, hija de un conocido dúo musical danés; y Antonio, nacido de su relación con la productora de cine islandesa Katrin Olafsdóttir. En la actualidad mantiene una relación con Sandra Blakstad, quien protagonizó su primer trabajo como realizador (Un tiempo precioso).
Su romance con Lydia Bosch fue muy sonado y copó no pocos titulares del papel couché. Se conocieron en la década de los noventa en la grabación de Lleno por favor. Y empezaron a salir en 1991. Eran guapos, jóvenes y estaban de moda. Parecían ser la pareja perfecta. Fruto de su unión nació su hija Andrea en 1992. Se casaron en 1994, pero apenas un año más tarde se separaron. El idilio que muchos daban por eterno solo duró cuatro años. Fue una historia tan apasionada como fugaz.
Lydia Bosch, con su hija Andrea Molina, fruto de su relación con Miki Molina. Instagram
Las mismas dosis de frenesí tuvo también su brevísimo flirteo con Ana Obregón. Trabajaron juntos en Ana y los siete y la química entre ellos traspasaba la pantalla. También fuera de cámara había feeling entre ellos. En diciembre de 2021, en un arrebato de fogosidad, se dejaron llevar en el interior de un coche. El resto es historia.
Las comprometidas imágenes de ellos dando rienda suelta a las pasiones de la carne fueron portada de una revista. Tras la publicación de las fotos se vieron en un aprieto. Y tomaron caminos separados. La relación no prosperó, pero los dos guardan un buen recuerdo del tiempo que el destino cruzó sus caminos. Tiempo después han mantenido una bonita amistad.
La portada de índole sexual con Ana Obregón sería el más light de sus escándalos. Además de su detención en Ibiza, hace cuatro años, en el verano de 2019, fue investigado -también en la isla balear- por un delito contra la seguridad vial, por un atropello a una niña en un aparcamiento de un restaurante de Santa Eulària. Tras someterse al test de alcoholemia, el actor dio positivo en las dos pruebas que le realizó la Policía. Entonces, la familia de la niña defendió al actor, pero aquello lo hundió anímicamente. En declaraciones públicas insistió en que no estaba ebrio, pero quedó la sombra de la duda.
Desde entonces no se ha vuelto a saber de él. Se ha mantenido al margen. Lleva una vida centrada en su familia y su trabajo. En una entrevista a Rosa Villacastín en Diez Minutos, en 2020, aseguró que sus hijos "son lo más importante que he hecho en mi vida". Y se calificó a sí mismo como "una persona honrada, muy luchador", que es lo que ha sido "toda mi vida".
A sus 61 años, vive apartado del foco. Su cuenta en Instagram es de carácter privado. La de X lleva ocho años inactivo. Pero él sigue en movimiento. Trabajando, que es lo que mejor se le da.
