La cantante ha abandonado el hospital después de enfrentar unos días difíciles debido a un cólico nefrítico en el quinto mes de gestación. Acompañada de su pareja, José Ángel Ortega, Gisela ha expresado ante los micrófonos de Europa Press: "Han sido unos días muy duros y muy intensos física y emocionalmente, sobre todo por el miedo de lo que le pudiera pasar al bollito, como yo digo".
La artista ha explicado que el cólico nefrítico se produjo debido a una piedra que se generó en el riñón y que, en su caso, no se desprendía, lo que podía ocasionar una infección peligrosa.