Alessandro Lequio (61 años) ha vuelto a abrir el álbum familiar y ha encontrado una fotografía junto a su hijo Álex Lequio que ha querido compartir con todos sus seguidores de Instagram. En la instantánea, el protagonista es el fallecido joven y su gran sonrisa, una mueca que le acompañó a lo largo de toda su vida, incluso durante su intensa batalla contra el cáncer.

Un gigantesco elefante copa la mayor parte de la imagen, y sobre el animal aparecen sentados Álex y su padre, relajados, felices y disfrutando del sorprendente momento a lomos de unos de los mamíferos más grandes del planeta.

Una vez más, sin necesidad de acompañar a la imagen con ningún mensaje en particular, el colaborador de televisión ha recurrido únicamente a los dos hashtags que emplea desde que su hijo dijera adiós para siempre el 13 de mayo de 2020: #AlessForever y #LequioCity. 

Como ocurre cada vez que Alessandro comparte alguna fotografía inédita con uno de sus hijos mayores, el post se ha llenado de bonitos mensajes y de comentarios que destacan la estrecha relación que mantenían padre e hijo. Pero entre todos esos textos, sobre sale, de nuevo, el gesto de Ana Obregón (66). La madre del joven solo ha querido dejar dos emojis junto a la publicación del padre de su hijo: dos corazones rotos.

Un viaje selvático

No es la primera vez que el italiano rescata una impactante imagen de su hijo junto a un majestuoso animal de la selva. Precisamente el 17 de agosto de este año, coincidiendo con el cumpleaños de su hija Ginevra, Alessandro publicaba una fotografía muy sorprendente. 

"Happy birthday, Ena", escribió el televisivo, utilizando el apelativo cariñoso con el que suele referirse a su hija pequeña. A esta felicitación añadió el hashtag #AlessForever (Álex para siempre) que tanto él como Ana Obregón suelen usar cuando publican recuerdos del joven. Esta publicación del conde no tardó en llenarse de emoticonos en forma de corazón y buenos deseos para la jovencísima Ginevra. Entre esas reacciones, una de las primeras fue la de García Obregón, que, pese a que desconocía que su hijo haubiera estado tan cerca de un tigre, alabó la valentía de su hijo:"¡Madre mía las cosas que hacíais! Nunca tuvo miedo a nada. ¡Felicidades, Ena!"

No es extraño que el marido de María Palacios escogiera esta instantánea para felicitar a su hija, ya que el que fuera su hermano mayor sentía auténtica adoración por su "pequeña criminal", como llamaba a Ginevra, por su carácter inquieto, propio de una niña de su edad. Álex pasaba todo el tiempo que podía con su hermana y también compartía pedazos de estos agradables ratos en su cuenta de Instagram, que hoy queda como un recuerdo imborrable de su intenso paso por la vida.

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