Fernando Tejero, 60 años

Fernando Tejero, 60 años

Corazón

Fernando Tejero, 60 años, sobre su trabajo en 'Aquí no hay quien viva': "Hacía un capítulo en tres días y grababa durante 18 horas"

El actor habla sin reparo sobre las largas jornadas laborales en la exitosa serie de televisión.

Más información: Mariló Montero hace llorar a Pepe Rodríguez en 'MasterChef Celebrity': "Le pregunté si había sido una buena hija".

Publicada

Fernando Tejero es uno de los rostros más queridos de la televisión española. Sin embargo, pocas personas conocen el sacrificio que hay detrás de cada episodio que vemos en pantalla.

Las largas jornadas de grabación han sido una constante en su carrera y él mismo lo ha contado, sin tapujos, en diversas entrevistas.

Tejero dejó claro en una reciente entrevista el nivel de exigencia que implicaba participar en una serie tan exitosa como Aquí no hay quien viva.

En palabras del actor: "En Aquí no hay quien viva hacíamos un capítulo en tres días y grabábamos durante 18 horas... cuando terminabas, te daban a lo mejor 25 páginas para el día siguiente que te lo aprendías en el coche de producción camino a tu casa... Ese era el nivel".

Estas largas jornadas no solo le pasaban factura físicamente, sino que también suponían un reto mental.

El ritmo frenético de grabaciones apenas daba tiempo para descansar y, mucho menos, para disfrutar de la vida fuera del plató.

El actor, de 60 años, confiesa que durante mucho tiempo su vida social y personal quedó relegada a un segundo plano.

El cansancio era tal que, al llegar a casa, solo podía pensar en el próximo guion que tenía que memorizar.

"Te lo aprendías en el coche. A veces era tal el agotamiento que no sabías ni el día en el que vivías", relata el actor cordobés.

Esta situación, según él, era común a todo el equipo de la serie, no solo a los actores principales. Guionistas, técnicos y personal de producción vivían el mismo nivel de exigencia, demostrando la entrega total que requería mantener una serie de tantos éxito en antena.

Pese a todo, el actor no muestra resentimiento. Al contrario, reconoce que la experiencia le dio una enorme fortaleza.

Tejero y los largos rodajes

"Somos unos privilegiados por poder trabajar en proyectos así, aunque nos deje sin vida por temporadas", comenta con humor.

De hecho, para Tejero, este esfuerzo fue una moneda de cambio que le permitió crecer no solo como actor, sino también como persona.

Muchos asocian la fama a la comodidad, pero historias como la de Tejero demuestran lo contrario. La presión por los plazos y la necesidad de estar siempre al máximo nivel afectan mucho a los actores.

"Lo ves en la tele y parece fácil, pero nadie imagina lo que hay detrás", indica el intérprete.

El sacrificio es, según él, parte inherente del oficio. "Tienes que amar tu trabajo porque es muy sacrificado. Hay días en los que solo quieres parar, pero el público no ve eso. Solo ven el resultado final".

La historia de Fernando Tejero es un recordatorio de que la pasión por la interpretación va más allá de los focos.

Los interminables días de rodaje, la falta de sueño y el cansancio son el precio de dar vida a personajes que ya forman parte de la memoria colectiva.

Su testimonio, cercano y sincero, revela el lado más humano de la televisión y ayuda a valorar el esfuerzo detrás de cada capítulo que enganchó a toda una generación.