Imagen de la Audiencia de Valladolid

Imagen de la Audiencia de Valladolid

Valladolid

Una veinteañera vallisoletana se libra de una deuda de 39.000 euros: avaló los préstamos de la empresa de su hermano

La joven, de 27 años, se enfrentaba a una deuda de casi 49.000 euros.

Más noticias: Una vecina de Ávila se libra de una deuda de 53.000 euros: pedía microcréditos para pagar otros créditos

Publicada
Actualizada

El despacho de abogados de Albacete Bautista Asociados ha logrado una sentencia, dictada por el Juzgado de lo Mercantil nº1 de Valladolid, que exonera a una joven de 27 años a más de 39.000 euros de deuda pública, superando el límite de 10.000 euros que hasta ahora se aplicaba de forma restrictiva en los procedimientos de segunda oportunidad.

La beneficiaria, que se endeudó porque respaldó los préstamos de la empresa de su hermano, ha podido así "recuperar su futuro y dejar atrás una deuda que, de otro modo, habría hipotecado su vida", aseguran mediante un comunicado.

Recuerdan que, hasta ahora, la aplicación estricta del Texto Refundido de la Ley Concursal limitaba la exoneración de créditos públicos a 10.000 euros. Sin embargo, han conseguido ampliar este umbral y, afirman, que se ha demostrado que en "casos excepcionales de buena fe y sobreendeudamiento involuntario, es posible exonerar cantidades mucho mayores".

La demandante, nacida en 1997, avaló los préstamos de la empresa de su hermano poniéndose como administradora. Tras la insolvencia y el posterior cierre sin concurso de la sociedad, quedó responsable de toda deuda pese a carecer de ingresos suficientes para afrontar esta carga.

El total de deuda pública con la Tesorería General de la Seguridad Social ascendía a 48.778,62 euros, de los cuales ha quedado liberada de 39.117,75 euros, reduciendo su obligación a 9.660,87 euros.

"Con esta sentencia no solo hemos conseguido aplicar correctamente la ley, sino que hemos devuelto a una joven la posibilidad de construir una vida digna: trabajar, acceder a una vivienda y formar una familia", explican desde el despacho.