Imagen de Manuel Herrero Muñoz, el vallisoletano que estaba entre los fugitivos más buscados.

Imagen de Manuel Herrero Muñoz, el vallisoletano que estaba entre los fugitivos más buscados.

Valladolid

El vallisoletano Manuel Herrero, uno de los criminales más buscados de Europa, se entrega en Madrid

Está acusado de presuntamente participar en el asesinato de un hombre en México, a quien escondieron en un bidón de combustible que llenaron de cemento

13 septiembre, 2023 13:56

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Manuel Herrero Muñoz, nacido en Valladolid en 1989 y uno de los 10 fugitivos más buscados en España, ha sido detenido en Madrid después de entregarse en dependencias policiales, según ha informado la Policía Nacional a través de un comunicado. Además, el pucelano también estaba incluido en la Europe's Most Wanted Fugitives de Europol.

El prófugo estaba siendo buscado por su presunta participación en el asesinato de un hombre en la Ciudad de México en 2012, donde, con otro participante, habrían agredido a la víctima con un instrumento cortante, produciéndole lesiones en el cuello y un traumatismo torácico y cervical.

Posteriormente, introdujeron el cadáver en un bidón de combustible y lo rellenaron de cemento, ocultando este en la bodega del domicilio donde sucedieron los hechos.  Estaba considerado de máximo interés por las autoridades mexicanas, quienes pedían para él una pena de 35 años de prisión.

La investigación comenzó en 2020 desde la Sección de Localización de Fugitivos, una vez se recibió la petición de colaboración de las autoridades judiciales y policiales mexicanas para localizarle, detenerle y extraditarle.

La investigación se centró en su entorno familiar y amistades, llevando a cabo desplazamientos e indagaciones por todo el territorio del país, contando con la colaboración de distintos cuerpos internacionales y nacionales, como por ejemplo la Red Enfast o NCA.

Manuel Herrero Muñoz fue incluido en la lista de 'Los 10 más buscados' en mayo de 2022 y en la Europe's Most Wanted Fugitives de Europol, con el objetivo de solicitar la colaboración ciudadana y restringir las posibles huidas y movimientos al ser reconocido.

El fugitivo llevaba desaparecido tres años, residiendo en distintas localizaciones de España, cambiando cada pocos meses de casa y viviendo clandestinamente con la ayuda de amigos y familiares. Cambió su aspecto físico con el objetivo de evadir su identificación. 

Finalmente, la presión policial y mediática ha desembocado que el prófugo de la justicia se haya entregado en las dependencias policiales donde fue arrestado por los agentes del Cuerpo Nacional de Policía y seguidamente puesto a disposición judicial.