El portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Valladolid, Javier García Bartolomé

El portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Valladolid, Javier García Bartolomé

Valladolid

Vox pide al Ayuntamiento de Valladolid bajar impuestos para “ayudar a familias y empresas a superar la crisis económica"

Llevará una moción al pleno que se celebrará el martes, 4 de octubre

29 septiembre, 2022 13:14

"El pasado mes de agosto hemos alcanzado en España una tasa de inflación interanual del 10,4%, tasa absolutamente desbocada y demoledora para la economía, tanto de las familias como de las empresas. Y desgraciadamente, esta situación no es coyuntural, sino que se ha convertido en un problema estructural, confirmado con el dato de variación interanual de la inflación subyacente del 6,4% (la más alta desde 1993), lo que hace que se consolide el encarecimiento permanente de los precios, provocando un empobrecimiento de los hogares españoles (y por ende, los vallisoletanos)", asegura Vox a través de un comunicado.

El partido explica que el proceso de empobrecimiento de la población es debido principalmente a cuatro factores:

a) El fuerte incremento del gasto por hogar para afrontar los recibos de suministros de electricidad, gas y/o gasoil.

b) La ralentización de la economía que implicará inevitablemente la pérdida de empleo de una parte de la población.

c) Los salarios no tienen posibilidad de adaptarse al brutal incremento del IPC, con la consiguiente pérdida de capacidad adquisitiva.

d) La creación de nuevas figuras impositivas y el aumento de las existentes por parte del gobierno de España.

"Otro factor de preocupación es el incremento de los tipos de interés. Tras la última subida aplicada por el Banco Central Europeo del 0,75%, los tipos de interés han alcanzado el 1,25%, y más preocupante aún, el BCE ha anunciado que seguirá incrementando los tipos de interés en el futuro", añaden en un escrito al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL de Castilla y León.

Aseguran que "este encarecimiento de la financiación se ve incrementado para familias y empresas por el margen aplicado por las entidades financieras, lo que en conjunto está llevándonos a que los tipos de revisión de las hipotecas alcanzan actualmente con facilidad el 3%, y es probable que alcance el 4% a finales de año o principios del que viene, lo que ahonda aún más la dificultad de los hogares vallisoletanos para afrontar esta situación de crisis".

El Grupo Municipal en el Ayuntamiento de Valladolid añade que este encarecimiento de la financiación también tendrá una importante repercusión en las finanzas del propio consistorio, en virtud del elevado nivel de deuda viva de 140 millones de euros (lo que supone que cada subida de un 1% del tipo de interés de
los préstamos bancarios concedidos, repercutirá en un aumento de los intereses pagados de 1,4 millones de euros), por lo que se hace absolutamente necesario reducir drásticamente el endeudamiento del ayuntamiento.

Por otra parte, la espiral inflacionista en la que nos encontramos también tiene un impacto en una mayor recaudación de impuestos a costa del contribuyente, entre otros motivos, porque al subir los precios, aumenta automáticamente la recaudación del Estado en concepto de IVA. Y así, se calcula que hasta junio de este año se ha producido un incremento de ingresos fiscales de 22.300 millones de euros más que en el mismo periodo de 2021, la mayor parte de los cuales corresponden al IRPF, IVA e Impuesto de Sociedades.

Y de ahí la motivación de esta moción: esta inflación desbocada y es mayor presión fiscal que estamos sufriendo los españoles, y los vallisoletanos en particular, puede ser aliviada o aligerada en parte en lo que corresponde al Ayuntamiento de Valladolid, con el objetivo de ayudar a las familias y a las empresas a superar la crisis económica que padecemos.Porque el Ayuntamiento de Valladolid mantiene en 2 de los principales impuestos municipales, el IBI y el IVTM, unos tipos de gravámenes muy por encima del mínimo legal, y también muy por encima de otras localidades de nuestro entorno, o porqué no decirlo, muy por encima de los gravámenes que tiene Madrid: si pretendemos fijar población en Valladolid, si queremos que sea una alternativa viable para vivir y que la gente decida quedarse y no emigrar, tenemos que ofrecer a las familias y a las empresas, entre otras cosas, un nivel de presión fiscal competitivo.

Porque nuestro municipio mantiene un tipo impositivo sobre los bienes inmuebles (IBI) del 0,6144%, un 50% superior al mínimo legal que es el 0,4%. Y con este impuesto, en este ejercicio 2022 el equipo de gobierno tiene presupuestado recaudar a los vallisoletanos un total de 74 millones de euros.

En cuanto a la recaudación por el impuesto de circulación de vehículos de tracción mecánica (IVTM), que afecta a la casi totalidad de los hogares vallisoletanos, y que supondrá una recaudación de 16 millones de euros según el Presupuesto del ejercicio 2022, tenemos que remarcar que es, por desgracia, el más alto de las 9 provincias de Castilla y León, y por supuesto, superior a las localidades de nuestro entorno más próximo.

Añaden que este encarecimiento de la financiación también tendrá una importante repercusión en las finanzas del propio consistorio, en virtud del elevado nivel de deuda viva de 140 millones de euros (lo que supone que cada subida de un 1% del tipo de interés de los préstamos bancarios concedidos, repercutirá en un aumento de los intereses pagados de 1,4 millones de euros), por lo que se hace absolutamente necesario reducir drásticamente el endeudamiento del ayuntamiento.

Por otra parte, la espiral inflacionista en la que nos encontramos también tiene un impacto en una mayor recaudación de impuestos a costa del contribuyente, entre otros motivos, porque al subir los precios, aumenta automáticamente la recaudación del Estado en concepto de IVA. Y así, se calcula que hasta junio de este año se ha producido un incremento de ingresos fiscales de 22.300 millones de euros más que en el mismo periodo de 2021, la mayor parte de los cuales corresponden al IRPF, IVA e Impuesto de Sociedades.

Y de ahí la motivación de esta moción: esta inflación desbocada y es mayor presión fiscal que estamos sufriendo los españoles, y los vallisoletanos en particular, puede ser aliviada o aligerada en parte en lo que corresponde al Ayuntamiento de Valladolid, con el objetivo de ayudar a las familias y a las empresas a superar la crisis económica que padecemos.

Porque el Ayuntamiento de Valladolid mantiene en 2 de los principales impuestos municipales, el IBI y el IVTM, unos tipos de gravámenes muy por encima del mínimo legal, y también muy por encima de otras localidades de nuestro entorno, o porqué no decirlo, muy por encima de los gravámenes que tiene Madrid: si pretendemos fijar población en Valladolid, si queremos que sea una alternativa viable para vivir y que la gente decida quedarse y no emigrar, tenemos que ofrecer a las familias y a las empresas, entre otras cosas, un nivel de presión fiscal competitivo.

Porque nuestro municipio mantiene un tipo impositivo sobre los bienes inmuebles (IBI) del 0,6144%, un 50% superior al mínimo legal que es el 0,4%. Y con este impuesto, en este ejercicio 2022 el equipo de gobierno tiene presupuestado recaudar a los vallisoletanos un total de 74 millones de euros.

En cuanto a la recaudación por el impuesto de circulación de vehículos de tracción mecánica (IVTM), que afecta a la casi totalidad de los hogares vallisoletanos, y que supondrá una recaudación de 16 millones de euros según el Presupuesto del ejercicio 2022, tenemos que remarcar que es, por desgracia, el más alto de las 9 provincias de Castilla y León, y por supuesto, superior a las localidades de nuestro entorno más próximo.

Así pues, finaliza el Grupo Municipal Vox, vista la alta presión fiscal que mantiene el equipo de gobierno con estos impuestos municipales (IBI e IVTM), entendemos absolutamente procedente realizar la propuesta de rebaja fiscal enunciada en los acuerdos de esta Moción.

Porque además, y analizado el Presupuesto de 2022, existe para el año próximo una posibilidad real de reducir, cuando no suprimir, gasto innecesario o de escaso retorno para Valladolid.

Y como además es previsible que puede incrementarse el montante de la transferencia del Estado por el incremento de ingresos por IVA e IRPF debido a este alza de precios, estamos convencidos de que los gobernantes deben sentir la suficiente empatía con los ciudadanos como para no caer en el despilfarro, perseguir la eficiencia en el gasto, buscar el ahorro del gasto superfluo e intentar reducir la carga impositiva que se carga a los administrados, máxime cuando se está pidiendo a los españoles que realicen un esfuerzo de contención y que soporten sobre sus espaldas el encarecimiento generalizado de bienes y servicios.

Esta disminución de la carga impositiva a nivel municipal permitirá por añadidura aumentar el circulante y por tanto, beneficiar el mantenimiento del empleo y aumentar la actividad económica en nuestra ciudad.

Por último, tenemos que señalar la reducida capacidad de este Equipo de Gobierno para ejecutar el presupuesto municipal, lo que lleva a que en cada ejercicio presupuestario resulte un superávit en las liquidaciones anuales. Este reiterado incumplimiento de los compromisos presupuestarios ha llevado, por ejemplo, a que el remanente de Tesorería en las cuentas del Ayuntamiento alcanzará al terminar 2021 una cifra superior a los 85 millones de euros, y mucho nos tememos que ocurrirá lo mismo a la finalización del presente ejercicio.

Estos remanentes de tesorería también podrán servir para equilibrar las cuentas municipales tras la rebaja fiscal que proponemos, porque no parece lógico que, en las circunstancias actuales, la administración local quiera mantener la recaudación de impuestos, dinero que se detrae del bolsillo de los ciudadanos, para que termine depositado en una cuenta bancaria a nombre del Ayuntamiento de Valladolid.

Por todo lo cual, y en defensa de los sectores económicos afectados y de los intereses generales de todos los vallisoletanos y de las empresas de nuestra ciudad, el Grupo Municipal VOX propone los siguientes:

ACUERDOS:

PRIMERO: Modificar el tipo impositivo del IBI que en la actualidad es del 0,6144% hasta el 0,45%, lo que supondrá una minoración del ingreso de aproximadamente 25 millones de euros.

SEGUNDO: Reducir el coeficiente multiplicador del Impuesto de Circulación en la proporción necesaria para reducir su recaudación en 3 millones de euros.

TERCERO: Amortizar deuda por un importe de al menos 50 millones de euros en el año 2023, lo que reducirá la carga financiera de nuestra ciudad y supondrá para los vallisoletanos

un ahorro de hasta 2 millones de euros, según los tipos que se estima que se alcanzarán en 2023.