La concejala de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible del Ayuntamiento de Valladolid, María Sánchez, tras la entrevista.

La concejala de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible del Ayuntamiento de Valladolid, María Sánchez, tras la entrevista.

Valladolid

María Sánchez: "La Agenda 2030 no va a dejar a nadie atrás. Hay que combinar sostenibilidad con igualdad"

La concejala de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible explica en una entrevista a este periódico la apuesta por "tener objetivos comunes entre las distintas ciudades"

1 septiembre, 2022 07:00

Europa se encuentra inmersa en un profundo proceso de reestructuración de sus ciudades con el objetivo de encontrar la mayor sostenibilidad y resiliencia en su lucha contra el cambio climático y las situaciones que ponen en jaque a la sociedad. En ese proceso de objetivos comunes se encuentra Valladolid, que ha apostado por la Agenda Urbana 2030 que está enmarcada dentro de las directivas europeas y también su homóloga a nivel nacional.

Una de las personas que encabeza este proyecto es la concejala de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible del Ayuntamiento de Valladolid, María Sánchez, que apuesta por "tener objetivos comunes entre las distintas ciudades". En una entrevista concedida a EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León ha explicado en que consiste la Agenda Urbana de Valladolid 2030 y que beneficios traerá a la Valladolid del futuro.

Para contextualizar primero un poco, ¿qué es la Agenda Urbana de Valladolid 2030?

Está enmarcada dentro de los objetivos de desarrollo sostenible, las agendas urbanas, también de la española y las directivas europeas. Digamos que es un documento de carácter voluntario por parte de las administraciones para que se suscriban a una serie de objetivos y realizar una serie de acciones para alcanzar esos objetivos de cara al 2030. En Valladolid muchos de los planes que contenemos en esta Agenda Urbana ya estaban en marcha, pero nos parece, a mí particularmente, muy interesante tener objetivos comunes entre las distintas ciudades, hablando de municipalismo, y sobre todo también tener los mismos indicadores para ver como vamos evolucionando hacia los objetivos o acciones que consideramos necesarias. Se trata, precisamente, de un instrumento que nos permite pensar en la ciudad o en la Valladolid que queremos ser en 2030. Sé que es muy abstracto, y por eso desde el Ayuntamiento estamos haciendo un esfuerzo muy importante para difundir lo que es y para qué sirve. Antes teníamos la Agenda Local 21 y tenemos un consejo específico. Hubo un consenso bastante grande en el ámbito municipal que yo creo que es interesante, pero muchas veces la gente no sabe en qué le cambia la vida.

¿Cuál es la Valladolid que queremos ser?

Una de las premisas de la Agenda 2030 es no dejar a nadie atrás. Es decir, hay que combinar la sostenibilidad con la igualdad. Los comportamientos ecológicamente responsables no pueden ser un lujo, tiene que estar al alcance de cualquiera. Y, por eso, son necesarios cambios estructurales y una planificación participada de la imprescindible transición ecológica de nuestras ciudades. La AUVA 2030 recoge con la implicación común, un conjunto de actuaciones concretas para transformar Valladolid. Para la elaboración de este Plan de Acción, Valladolid ha contado con la financiación del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia y de los fondos Next Generation de la UE. Además, la implicación de todas las concejalías y el trabajo de las entidades y personas que se han embarcado en el proceso participativo está siendo esencial. ¿Y cuáles son los contenidos de esta estrategia? Se trata de una revisión global de todas las políticas urbanas bajo la lupa de la sostenibilidad. Acciones sobre planificación urbanística, de salud y bienestar, de gestión de los recursos, de movilidad, de desarrollo económico, de vivienda, de innovación…

En resumen, la Agenda 2030 tiene que ser el mapa que guíe los pasos de nuestra ciudad hacia el futuro. La política municipal tiene la belleza de actuar sobre lo cercano y lo inmediato, permite hacer mejoras en un barrio o una calle que pueden parecer pequeñas pero que cambian a mejor nuestra vida cotidiana. Sin embargo, la política municipal también tiene que servir para pensar en los grandes retos; aquello de actuar en local pensando en global. Nos jugamos qué ciudad y qué mundo vamos a dejar en herencia a las generaciones venideras. Es el momento de dar prioridad a lo importante sobre lo urgente. Por eso, trabajamos día a día para la construcción de una ciudad más habitable, con futuro, sostenible y radicalmente democrática.

¿Cuáles son los ejes de trabajo de la Agenda Urbana de Valladolid 2030?

Tenemos 10 objetivos de carácter estratégico que tienen que ver con el desarrollo urbano, con el medioambiente o con la sostenibilidad porque todo está basado bajo el paraguas de la sostenibilidad, pero son objetivos de carácter transversal. Hablamos de gobernanza y de participación ciudadana, de no dejar a nadie atrás, es decir, de políticas de acción social. Cubre todo el espectro municipal pero ordenado en objetivos y acciones concretas. Lo que hemos hecho hace un año es aprobar un plan estratégico y recientemente en julio aprobamos el plan estratégico de las acciones. Esto es interesante porque Valladolid ha sido seleccionada como ciudad piloto para llevar a cabo está Agenda Urbana 2030 y han conseguido unos fondos de 250.000 euros para difundirla. Es un documento vivo porque no puede ser de otra manera, ya que hasta 2030 hay cosas que habrá que incorporar, incluso que modificar, pero tiene los parámetros de los planes del futuro de la ciudad.

¿El orden de estos objetivos se debe a algo?

No es un orden de jerarquía. Es un orden que va en consonancia con el marco estratégico y los parámetros que tiene la Agenda Urbana española para unificar criterios. Por ejemplo el último es gobernanza porque es transversal y se debe a la participación para hacer este tipo de agendas. Ya hemos hecho por ejemplo distintos foros urbanos en los que han participado colectivos y entidades interesadas. El Consejo de la Agenda Local 21, que se va a reconvertir al Consejo de la Agenda Urbana 2030, ha dado visto el bueno al documento, también el Consejo Social de la ciudad y además hemos organizado foros temáticos y recogidas a través de la web de distintas propuestas. Yo creo que eso es un poco el objetivo fundamental, hacer instrumentos pero no solo las administraciones, sino que la gobernanza sea plural.

Precisamente le iba a preguntar por ello, ¿cómo puede participar la ciudadanía?

Vamos a tener ese canal abierto, ahora ya tenemos aprobado el plan, pero recuerdo que es un documento vivo, y además anualmente se va a revisar, es decir, se pueden hacer llegar propuestas para intentar incluir otras cuestiones en el documento. No obstante, digamos que el Gobierno Municipal está abierto, hacemos asambleas abiertas, recibimos las propuestas que lleguen y el documento tiene que ser así, aparte de evaluar anualmente los indicadores que en esto parece algo muy teórico y abstracto pero es importante que las acciones no queden solo en papel y puedan guardarse en un cajón, sino que las administraciones digamos: estamos cumpliendo esto, para esto tenemos tal presupuesto, etc.

¿En qué va a beneficiar la Agenda Urbana de Valladolid 2030 a la ciudad?

Aparte de intentar caminar hacia una ciudad más sostenible, es ser más resilientes, que es una palabra que está muy de moda pero que no deja de ser una cuestión que lamentablemente nos está tocando vivir en los últimos tiempos. Es la capacidad de adaptación a los cambios, a las sequías extremas que estamos viviendo en nuestra Comunidad, pero también evidentemente a la crisis de los materiales, etc. Es hacer un instrumento que sea capaz de enfrentarse a los retos que tenemos. Algunas de las cuestiones clave son la sostenibilidad, la calidad del aire o la contaminación acústica en las ciudades. Todo eso está en marcado en planes concretos como el plan de calidad del aire, el plan de movilidad, la zona de bajas emisiones que entrará en vigor y que se está haciendo ahora la ordenanza para finales del año 2023, pero también derechos básicos como la vivienda. Valladolid se va a beneficiar de ciertas acciones que consideramos que tienen que perdurar en el tiempo para conseguir derechos firmes a nivel ciudadano y municipal.

Ahora que los efectos del cambio climático parecen notarse más, ¿está la gente más concienciada con la Agenda Urbana de Valladolid 2030?

La Agenda Urbana de momento es un instrumento demasiado teórico. Cuando ya entren en vigor y empiecen a implementarse las acciones, que muchas ya se llevan haciendo pero bajo la etiqueta de Agenda Local, la gente se va a familiarizar más con el nombre. A mayores de dar a conocer el instrumento que me parece interesante por el objetivo de desarrollo sostenible, creo que lo importante es que esos planes y acciones cambien la vida de la gente para mejor. Es el momento de llevarlo a cabo. Por ejemplo el plan de Vivienda como el que tenemos ahora y que está enmarcado en la Agenda. En vez de haber 12 viviendas públicas que había antes de 2015, se ha multiplicado el parque a casi 200 para que gente con pocos recursos pueda tener un alquiler social. Es lo que cambian la vida de la gente. Que la calidad del aire sea mejor para que cuando implementemos la zona de bajas emisiones no haya alertas por contaminación hará que Valladolid sea una ciudad más saludable y con menos ruido. Ese tipo de acciones es lo que yo creo que va a hacer que la gente se familiarice con las acciones de la Agenda Urbana.

Para acciones concretas como, por ejemplo, la accesibilidad, ¿qué se va a hacer?

En este tipo de agendas lo importante es la transversalidad, están todas las áreas implicadas. La accesibilidad es del área de acción social conjugados con la de movilidad en los cuales hay planes específicos de accesibilidad, es decir, no solo urbanísticas de barreras arquitectónicas, sino también a nivel de promover viviendas de VIVA y que haya accesibilidad por ejemplo en temas de ascensores, portal o vivienda. Hay por un lado acciones de nivel urbanístico y otros de ayudas al día a día.

En 2023 hay elecciones municipales, ¿está garantizada la planificación de la Agenda Urbana de Valladolid 2030 independientemente de lo que pase?

Las agendas urbanas y este tipo de documentos estratégicos, al margen de las diferencias políticas que puede haber, nacen con vocación de permanencia ¿Quién va a estar en contra de los objetivos de desarrollo sostenible? Deberían ser opciones políticas que se enmarcan fuera del marco democrático ¿Cómo alguien va a estar en contra de que haya derecho a la salubridad o derecho a una calidad del aire óptima? El tema es que las acciones tienen que ser ambiciosas porque si no nos quedamos atrás. Hasta hace bien poco la gente no hemos notado los efectos del cambio climático, tienen que llegar los cambios o los problemas extremos para que seamos conscientes. Recuerdo que cuando se implantó Madrid Central había un ciudadano que decía que donde estaba la contaminación que no la veía. Desde entonces yo creo que las ciudades, por ejemplo en Valladolid, hay una importante labor para que la gente entienda porque es nociva la contaminación para la salud y sobre todo para las personas más sensibles.

Todo ese tipo de acciones tendrían que ser y estar al margen de ese debate político porque creemos que ciertas cotas de bienestar que se quieren alcanzar en 2030 deberían ser compartidas por todos. En el cómo llegar a ellas evidentemente puede haber diferencias o distintas propuestas, pero hay que actuar porque yo creo que como está avisando el planeta ya llegamos tarde. Hay que ser ambiciosos, por tanto, espero que este tipo de instrumentos gobierne quien gobierne se mantengan. No obstante, está claro que opciones políticas apostamos muchas veces más por este tipo de cambios.

Por último, hay mucha gente que cree que las acciones se llevan únicamente en el centro de la ciudad, pero ¿cómo va a llegar la Agenda Urbana a los barrios?

En eso hemos hecho un esfuerzo en el ámbito de la participación. Los foros urbanos no han sido solo en un centro cívico determinado, sino que han ido por toda la ciudad y eso es lo que pretendemos. Al igual que hacemos con todas las políticas municipales tanto culturales como de participación ciudadana, también evidentemente de inversión por la parte que me toca a nivel de agua o de parques y jardines, estamos intentando que lleguen a todos los barrios. De hecho, hay barrios más necesitados que otros, hay que reequilibrar la ciudad. Entendemos que el trabajo con los barrios es muy importante. Hay colaboraciones muy interesantes con Pajarillos con su red 'Pajarillos Educa' y también las asociaciones son grandes aliadas para llevar esa Agenda Urbana a los barrios.