Feria de San Pedro Regalado. Fotos: Natalia Calvo

Feria de San Pedro Regalado. Fotos: Natalia Calvo

Valladolid

Ventura, El Juli y Manzanares a hombros

15 mayo, 2022 10:12

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Tarde de temperatura agradable con la presencia de lluvia en el último toro. Media plaza en el coso del Paseo Zorrilla. Se lidiaron dos toros de Guiomar Cortés de Moura para el rejoneador Diego Ventura, y dos de Domingo Hernández y Garcigrande para El Juli y Manzanares.

Diego Ventura

No pudo desplegar su toreo el de La Puebla con el primero de su lote. Toro abanto de salida, barbeando las tablas, soso y sin transmisión alguna. Todo lo hizo Ventura a lomos de la espectacular cuadra de caballos que tiene, destacando Campina y Fino.

A pesar de ello Ventura fue capaz de encelarlo y llevarlo a los medios poniendo tres banderillas al estribo de mucho mérito arrancando la ovación del respetable. Mató de pinchazo, rejón trasero y descabello no sin antes instrumentarle algún que otro muletazo.

Feria de San Pedro Regalado

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El segundo de su lote, no tuvo nada que ver con el primero, tuvo movilidad, codicia, transmisión y nobleza. Le recibió el centauro sevillano en los medios, colocando un rejón de mucho mérito porque el toro se le vino con fuerza. A continuación, puso tres banderillas de muchísimo mérito, después de hacerle el paso atrás a sus caballos para, una vez arrancado el toro, hacer la batida y colocar las banderillas arriba y al estribo. Espectacular Diego Ventura poniendo a la gente en pie. Mató de rejonazo trasero, tardando el toro en doblar. Dos orejas.

El Juli

Venía enrachado El Juli a Valladolid después de sus triunfos en Sevilla, Madrid y Jerez. Figura de época el madrileño que después de 25 años de alternativa sigue con la hierba en la boca.

En el primero de su lote estuvo sensacional, en Maestro. El toro que si bien era noble, un tanto soso y justito de fuerzas, en cuanto tocaba la muleta soltaba la cara. Tenía una virtud, la humillación, salía del muletazo con la cara ya colocada, y el madrileño a base de sobarle mucho y templarlo, sacó muletazos de mucho mérito llegando al público. Mató de estocada en la suerte contraria, cortando una oreja.

Feria de San Pedro Regalado

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El segundo de su lote, junto con el segundo de Manzanares, fueron los toros de la corrida. Bien hecho, en tipo, bajito y bonito de cara, con un peso en la romana de 467 kg. Ya en los corrales al que suscribe le llamó la atención. El toro enseñó en uno de los capotazos de uno de los subalternos, José Núñez “Pilo” que tenía un pitón derecho extraordinario, haciendo el avión, y del pitón izquierdo ya se encargó El Juli de hacérselo ver al respetable. A pesar de ello, no hubo acoplamiento y la faena se diluía en tandas por ambos pitones, hasta que en la última por el pitón derecho Julián demostró el lugar que ocupa en el toreo levantando al público de sus asientos. Mató de estocada trasera, cortando dos orejas. Generoso el público, generosa la presidencia.

Manzanares

El diestro alicantino lidió un primer toro, de Domingo Hernández, muy soso, noble y muy justito de fuerzas. Tuvo mucho mérito su actuación porque en todo momento le llevó cosido a la muleta con muletazos muy templados lo que hizo que el toro no se viniera abajo pero aquello no llegaba al público. Tandas de tres y el de pecho, se sucedían una tras otra. Mató de dos pinchazos y estocada. Ovación.

Feria de San Pedro Regalado

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En el segundo, de Garcigrande, toro negro, de 549 kg, estuvo sensacional. Pudimos ver al Manzanares que tantas veces hemos visto aquí. Ya el saludo capotero por verónicas a pies juntos, rematado con dos medias con el compás muy abierto, era el preludio de una faena de altos vuelos. Y así fue, las tandas, tanto por el pitón derecho como por el izquierdo fueron de torero maduro, con poso, enganchando al toro con los vuelos adelante, llevándole muy despacio y cosidito a la muleta hasta rematarlo atrás en la cadera. Se le veía a gusto al alicantino y se sucedieron las tandas tanto por un pitón como por el otro de una gran profundidad, hasta el punto de que alargó quizás un poco la faena. Mató de estocada, cortando dos orejas.

En definitiva, tarde de triunfo y de buen toreo en el coso vallisoletano, actuando de sobresaliente el matador de toros salmantino Álvaro de la Calle quien no tuvo la oportunidad de actuar.