Los hechos se inician a raíz de una llamada al teléfono de emergencias 112 en la que se informa que un turismo circula en sentido contrario a la altura del Km 137 de la A-62 sentido Burgos por calzada sentido Portugal. Por patrulla del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Valladolid y Seguridad Ciudadana del Puesto de Cabezón de Pisuerga se establece un dispositivo para localización de dicho vehículo que según última información habría provocado un siniestro vial por raspado con otro que transitaba por el km 124,100 de la A-62 dirección Portugal con el resultado de daños.

El turismo es interceptado en el Km 116 de la A-62 (término municipal de Cigales en Valladolid), arrojando el conductor en prueba de alcoholemia un resultado positivo de 1,02 y 1,12 mg/l en primera y segunda prueba. Por el equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil se procedió a la investigación de dicho conductor por la supuesta comisión de un delito de conducción temeraria y otro por conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas, remitiendo las correspondientes diligencias al Juzgado de Instrucción de guardia de Valladolid.

Conducción temeraria

Desde la Delegación del Gobierno se recuerda que la “conducción temeraria es el exponente de la conducción más inapropiada y la ingesta de bebidas alcohólicas, así como la de drogas y sustancias tóxicas, influyen en el conductor de un vehículo con la disminución de la capacidad sensorial, de reflejos y de atención en la conducción, desvirtuando la percepción de la realidad, determinando una conducción inapropiada y creando un concreto peligro para la vida propia y del resto de los usuarios de la vía, aumentando exponencialmente la posibilidad de sufrir un siniestro vial”.