Fachada principal del Centro Penitenciario de Topas, en Salamanca.

Fachada principal del Centro Penitenciario de Topas, en Salamanca.

Salamanca

Grave incidente en la cárcel de Topas: un recluso muestra sus genitales a una psicóloga durante una entrevista

El interno, marroquí y reincidente, fue trasladado al módulo 7 tras varios episodios violentos en distintos centros penitenciarios.

Más información: Un preso recién llegado de Algeciras rompe la cara a un funcionario en Topas: "Es muy peligroso"

Publicada
Actualizada

Noticias relacionadas

La prisión de Topas ha vuelto a ser escenario de un incidente que refleja la tensión con la que conviven a diario los profesionales penitenciarios.

Durante la mañana del pasado martes, un interno de origen magrebí con un largo historial de altercados en distintos centros, exhibió sus genitales a una psicóloga mientras esta le atendía en un despacho del módulo 7.

El sindicato ACAIP-UGT ha denunciado públicamente lo ocurrido y ha recordado que no es un episodio aislado.

En conversación con EL ESPAÑOL de Castilla y León, aseguran que cada vez llegan más internos con perfiles conflictivos y acusan a Instituciones Penitenciarias de aplicar un “buenismo” en la clasificación interior que, en la práctica, pone en riesgo a los trabajadores.

Un protocolo cuestionado

Los representantes sindicales señalan también la masificación que arrastra Topas y cargan contra un protocolo de agresiones que consideran “inoperante”.

Critican que no contemple medidas de apoyo real a los funcionarios que sufren ataques o situaciones de acoso y vuelven a insistir en su reivindicación histórica: el reconocimiento de los funcionarios de prisiones como agentes de la autoridad.

En este caso, subrayan, la rápida actuación de los trabajadores evitó que la situación fuera a más.

Aun así, recalcan que incidentes de este tipo se han vuelto frecuentes y que en las últimas semanas dos funcionarios resultaron heridos tras agresiones físicas de gran violencia.

La sombra de Sevilla II

El suceso ha despertado inevitablemente la memoria de la reciente agresión sexual sufrida por una psicóloga en la cárcel de Sevilla II, un episodio que conmocionó al colectivo y que, según ACAIP-UGT, debería haber hecho saltar todas las alarmas.

Para el sindicato, la concatenación de incidentes en Topas refleja un clima laboral cada vez “más hostil y complicado”, especialmente en los módulos con internos de mayor conflictividad.

Los trabajadores, concluyen, siguen cumpliendo con profesionalidad, pero lo hacen, dicen, en unas condiciones que consideran insostenibles.