Carlos García Carbayo durante su visita las obras en el Camino de las Aguas
Así se transforma Salamanca calle a calle: 3,7 millones para renovar el agua en 10 barrios
La inversión permitirá sustituir la red en barrios como Garrido, Chinchibarra o La Vega y evitar fugas con el sistema inteligente de presiones.
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El Ayuntamiento de Salamanca ha puesto en marcha uno de los mayores despliegues de renovación de redes de abastecimiento de agua de los últimos años.
En total, a lo largo de 2025, se sustituirán más de 11,5 kilómetros de tuberías en 69 calles repartidas por diez barrios de la ciudad, con una inversión global cercana a los 3,7 millones de euros.
El alcalde, Carlos García Carbayo, ha visitado este miércoles las obras que acaban de comenzar en el Camino de las Aguas, en el barrio de Prosperidad, donde se da el pistoletazo de salida a una actuación que también llegará próximamente a las calles Jorge Ibor y Villaviciosa.
Este impulso forma parte de un plan municipal más amplio que, solo en esta legislatura, ya suma más de 15,6 kilómetros de redes renovadas en 74 calles, con un presupuesto conjunto que ronda los 4,8 millones.
Y es la continuación de una línea de trabajo iniciada en el mandato anterior, en el que se realizó la renovación de cerca de 21,5 kilómetros de redes en 106 calles y una inversión superior a los 8,7 millones.
Menos averías, más eficiencia
Una de las claves de este esfuerzo inversor ha sido la implantación del sistema de Gestión Activa de Presiones (GAP), que regula la presión en la red en función de la demanda.
Desde su entrada en funcionamiento en 2017, se estima que Salamanca ha ahorrado más de 18,8 millones de metros cúbicos de agua, una cifra que equivale al consumo anual de toda la ciudad.
Además, el GAP ha tenido un impacto directo en la reducción de averías. En 2024, las roturas de tuberías se redujeron un 17,4% respecto al año anterior, y un 56,1% en comparación con 2017.
Solo en el primer semestre de 2025 se han contabilizado 49 roturas, lo que supone un descenso del 43% respecto al periodo previo a la implantación de este sistema inteligente.
La monitorización constante del estado de la red, a través de más de 10.000 datos diarios que se reciben en el centro de control de la potabilizadora, permite actuar con rapidez ante cualquier incidencia, minimizar el número de hogares afectados y alargar la vida útil de las infraestructuras.
Actuaciones por barrios
El plan de 2025 incluye actuaciones en los barrios de Blanco, Centro, Chamberí, Chinchibarra, El Rollo, Garrido, La Vega, Pizarrales, Prosperidad y Vidal.
Tras la renovación de 16 calles en Chamberí, las obras avanzan en La Vega, donde se actúa en cinco calles (Palos de la Frontera, Navegantes, Descubridores, Barco y Felipe II), con un trazado mallado y válvulas en cada derivación.
También se renueva por completo la red de saneamiento y acometidas domiciliarias.
En Vidal, las obras continúan en el paseo del Gran Capitán con 230 metros de nueva red. En el mismo barrio se actuará en otras siete calles (Carpinteros, Cuchilleros, Curtidores, Pescadores, Tapiceros, Vidrieros y Joyeros), con una inversión de casi 190.000 euros.
En El Rollo se renovarán más de 770 metros de red en once calles, y en el barrio Blanco se incluyen 291 metros dentro del proyecto de urbanización entre Santa Rita y Río Jordán.
Carlos García Carbayo durante su visita las obras en el Camino de las Aguas
También entre Blanco y Pizarrales se renovarán 940 metros en Alfareros, Marineros y Profesor Lucas, con un 78,5% de financiación autonómica. En la misma zona se intervendrá en otras cinco calles más con 721 metros y un presupuesto base de 263.507 euros.
Otro de los bloques más destacados será el de Pizarrales y Chamberí, con más de 1.000 metros en calles como San Matías, Santa Rosa de Lima, San Ernesto o Gil González Dávila.
En Chinchibarra, las obras llegarán a la avenida de San Agustín y a la calle Docencia, sumando casi un kilómetro de nueva red.
Por último, en pleno centro, se renovarán 997 metros de las calles Pozo Amarillo y paseo de la Estación, conectando con las mejoras ya ejecutadas en 2023 desde el parque de La Alamedilla.
Más allá de las tuberías
En todos los casos, las obras contemplan también la renovación de acometidas domiciliarias, la instalación de bocas de riego, hidrantes contra incendios, ventosas, pozos de limpia y desagües.
El objetivo es mejorar no solo la eficiencia del sistema, sino también la calidad del servicio que reciben los ciudadanos y la respuesta ante posibles emergencias.
“El agua es un recurso valioso y escaso. Por eso, en Salamanca estamos apostando por una red moderna, inteligente y sostenible que garantice el suministro presente y futuro para todos los vecinos”, subrayó el alcalde durante su visita.