Un piano sobre el agua, versos en los jardines y ecos barrocos en la Catedral

Salamanca se sumerge esta semana en un paisaje sonoro singular con tres propuestas musicales incluidas en el ciclo Plazas y Patios. La más insólita: Pedalopiano. À fleur d’eau. El Piano Flotante, un viaje musical sobre el río Tormes en el que piano y voz navegan entre el jazz y la chanson francesa desde una plataforma flotante. Será el viernes 25 y el sábado 26, a las 20:30 horas, bajo la Iglesia del Arrabal, en el Paseo del Progreso.

Este espectáculo a flor de agua, protagonizado por la cantante Louise Perret y el pianista Cédric Granelle, promete una experiencia emocional y sensorial, con ecos de Nougaro y Barbara y composiciones propias, evocando la infancia, el deseo y la belleza líquida de la música.

La programación arranca este jueves en la Catedral Nueva con un concierto del ciclo de órgano a cargo del intérprete vasco Esteban Landart, que ofrecerá piezas de Muffat, Frescobaldi, Farnaby o Bull. Landart, uno de los organistas más reconocidos del ámbito europeo, compagina su labor como docente con una dilatada trayectoria internacional.

El sábado, la música vuelve a tierra firme con Entavía, grupo salmantino que actuará a las 22:00 en los Jardines de Santo Domingo. Su repertorio, a medio camino entre la tradición, la poesía y la canción protesta, mezcla ritmos ancestrales con relatos cotidianos que desdibujan fronteras y rescatan historias ocultas bajo la piel del folclore.

Tres escenarios, tres lenguajes, un mismo latido: el de la música habitando los rincones más inesperados de Salamanca.