Reunión de la Red de Titulares de Centros de Acogida para Víctimas de Violencia de Género

Reunión de la Red de Titulares de Centros de Acogida para Víctimas de Violencia de Género R. Cacho ICAL

Región

Así son los centros de acogida a víctimas de VioGén en Castilla y León: ocupación inferior al 50% y una media de 20 días

La estancia en una casa de acogida es voluntaria, ya que algunas víctimas optan por quedarse en su municipio o en su entorno familiar.

Más información: La Junta amplía el paraguas protector a las víctimas al regular por ley nuevas formas de violencia de género

Publicada

La Junta de Castilla y León consolida su compromiso en la lucha contra la violencia de género a través de una extensa Red de atención a víctimas, integrada por 18 centros, cinco de emergencia y trece casas de acogida, con un total de 236 plazas.

 A lo largo de 2024, estos dispositivos acogieron a 379 mujeres y 248 menores, brindándoles protección, atención integral y acompañamiento continuado.

Con motivo de la XII Reunión de la Red de titulares de centros de acogida, celebrada este martes en la Fundación Intras de Valladolid, la vicepresidenta de la Junta y consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, destacó el “amplio abanico de servicios” disponibles para estas mujeres.

Entre ellos, se incluyen espacios habitacionales seguros, asesoramiento jurídico, atención psicológica y acompañamiento profesional, incluso sin necesidad de denuncia previa.

Los centros de emergencia, situados en Burgos, Ponferrada, Soria, Valladolid y Zamora, garantizan una respuesta “urgente” e “inmediata” para proteger la integridad de las víctimas.

Estos centros, gestionados por Cruz Roja y financiados con 1,1 millones de euros de la Junta, cuentan con 65 plazas y una estancia media de entre 15 y 20 días.

Las casas de acogida, por su parte, pueden albergar hasta 151 personas y están atendidas por entidades locales y organizaciones del Tercer Sector.

La administración autonómica destinó 487.000 euros a los ayuntamientos y diputaciones encargadas de estos servicios, y 662.000 euros a entidades como Adoratrices, Cáritas o la Asociación Beatriz de Suabia.

“La puerta de entrada a estos recursos deben ser los Servicios Sociales, pero también la puerta de salida hacia una vida libre y autónoma, mediante el empleo y el acceso a una vivienda digna”, subrayó Blanco a Ical, quien recordó que la estancia en las casas de acogida es voluntaria.

Atención especializada

Uno de los avances más significativos de 2024 fue el impulso del protocolo de atención dual para mujeres víctimas de violencia de género con enfermedades mentales o problemas de adicción.

La Red cuenta con dos dispositivos especializados: la Fundación Aldaba (10 plazas para mujeres con adicciones, que atendió a 16 personas el año pasado) y la Fundación Intras (otras 10 plazas para mujeres con enfermedad mental grave, que asistieron a 25 víctimas).

“No podemos permitir que una adicción o una enfermedad mental se conviertan en un obstáculo para salir de la violencia”, recalcó Blanco, quien defendió una atención integral y personalizada, con la coordinación de servicios sanitarios, sociales y cuerpos de seguridad.

Pablo Gómez, director de Intras, recordó que una mujer con enfermedad mental grave tiene hasta cuatro veces más posibilidades de sufrir una nueva agresión.

“No podemos ignorar esta estadística abrumadora. Nuestro trabajo es ofrecer apoyos para que esas mujeres puedan rehacer sus vidas con dignidad”, señaló.

La Junta también apuesta por la capacitación de los profesionales que trabajan con víctimas de violencia de género. En 2024, se formaron 6.727 personas —entre abogados, psicólogos, trabajadores sociales y docentes—, lo que supone un incremento del 66% respecto al año anterior.

Este compromiso institucional se tradujo en un aumento del 25% del presupuesto destinado a los recursos habitacionales, hasta alcanzar los 2,5 millones de euros, reforzando así la capacidad de respuesta del sistema ante una problemática que exige una intervención transversal, continua y sensible a las particularidades de cada víctima.