Igea en la reunión con la Universidad de Burgos / ICAL

Igea en la reunión con la Universidad de Burgos / ICAL

Región

Igea confía en que el mapa de fosas en Castilla y León esté concluido “antes” de 2022

El vicepresidente de la Junta sostiene que el objetivo es que les ayude "a que las cosas no se repitan" y "ser mejores”

27 octubre, 2021 17:14

Mariluz Martínez / ICAL

El vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, confió hoy en Burgos en que el mapa de fosas de la Guerra Civil y dictadura franquista en Castilla y León esté terminado “antes de que finalice el año”. “Es un trabajo riguroso, preciso y científico, en el que se ha contado con la colaboración de todas las asociaciones que han querido aportar sus datos, es un trabajo muy necesario para conseguir tener una documentación ordenada, científica”, resaltó.

Asimismo, subrayó que las fichas de este mapa de fosas “han servido de ejemplo” al Gobierno central por “su cantidad de detalle y de elaboración”, al tiempo que esperó que este trabajo sirva a su objetivo fundamental, que es que “el conocimiento de lo sucedido nos ayude a que las cosas no se repitan y nos ayude a ser mejores”. “Un pueblo que no conoce su historia, un pueblo que no fomenta el estudio riguroso de su historia es un pueblo destinado a cometer los mismos errores, una y otra vez”, advirtió.

Igea se reunió este miércoles con el decano de la Facultad de Humanidades y Comunicación de la Universidad de Burgos (UBU), Ignacio Fernández de Mata, para realizar el seguimiento del convenio suscrito en materia de Memoria Histórica entre el Gobierno autonómico y esta institución académica en diciembre de 2020. En esta cita también estuvieron presentes el secretario general de la Consejería de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, José Miguel García; y el presidente del Consejo Asesor Memoria Histórica, Ángel Hernández.

Así, aplaudió el grado de evolución de la tarea encargada y reconoció estar “muy satisfechos” con este trabajo que tildó de “muy importante”. “Va a ser un resultado que va a estar a disposición de todos, se publicará en la página de Transparencia y también se ha ofrecido al Gobierno trasladar todos los datos y los resultados para elaborar censos nacionales si fuera preciso, un mapa conjunto nacional”, avanzó.

En este sentido, aseguró que el Ejecutivo central “lo ha visto con muy buenos ojos” y resaltó que “la ficha es un modelo para lo que se va a hacer a nivel nacional y esperamos que antes de que comience el año que viene tener ya todo el estudio en nuestro poder”. Se trata, dijo, de “una herramienta que nos va a servir para hacer muchas cosas” y apuntó que “aparte de publicarlo, la visualización nos va a servir también para ordenar nuestros trabajos de exhumación, así como para recibir más informaciones”. “Es una abierta la herramienta que no va a quedar cerrada porque el simple hecho de publicarlo y difundirlo estamos seguros de que nos va a proporcionar más información”, apostilló Igea.

Por tanto, aseveró que “sirve para ordenar los trabajos, para el conocimiento y también como herramienta de mejora permanente; no es un trabajo que queda cerrado, sino que es un trabajo que queda permanentemente abierto”. El vicepresidente de la Junta indicó que son más de 500 las fosas localizadas ya en el mapa, con fichas completas de lo sucedido y destacó que “eso, al hacerlo público, probablemente va a tener un efecto llamada de información que nos va a permitir tener una información cada vez más perfecta”.

Tipología muy variada

El decano de la Facultad, Ignacio Fernández de Mata, explicó que la tipología de las fosas investigadas es muy variada, tanto en tamaño como distribución geográfica. “La cifra estimada de víctimas de la represión franquista en Castilla y León está en torno a 6.000 ó 7.000 personas, de las cuales se han exhumado unas 2.000. Hemos tratado de organizar toda la información de que se dispone, para obtener una herramienta que permita una mejor planificación, una mejor atención a la demanda de las familias y un mejor conocimiento de lo sucedido”.

La dificultad de reunión de la información, y la prudencia necesaria para su investigación, también fue puesta de relieve por el decano. “Mucha información oral se está perdiendo, hay fosas irrecuperables al haberse visto afectados por una obra pública, una autopista, el crecimiento de un polígono…pero muchas podrán ser recuperadas con esta herramienta que permitirá programar las tareas gracias a una información mejor organizada”, manifestó.