El Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Ávila ha decidido llevar a cabo la suspensión de las quemas de rastrojos en terrenos forestales o a menos de 400 metros de estos debido a la total ausencia de lluvias actual, lo que ha provocado una gran sequedad en la vegetación y que supone un elevado riesgo de incendios.

Según la Delegación Territorial de la Junta, la suspensión tendrá efecto desde el 23 de febrero.

La razón de esta suspensión es "la total ausencia de lluvias y la consiguiente sequedad de la vegetación en los terrenos de la provincia de Ávila, lo que supone un elevado peligro de que se produzcan incendios, hecho que se ha manifestado en los numerosos siniestros de este tipo ocurridos en los últimos diez días".

Esta suspensión incluye las quemas autorizadas con anterioridad y que están pendientes de ejecución. En el momento que cambien las condiciones meteorológicas, se procederá a la reapertura del periodo de autorizaciones.

Desde la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Ávila se solicita "la máxima precaución tanto en la suspensión de las quemas como en la utilización de cualquier fuente de calor que pueda ser causa de ignición hasta que las temperaturas y condiciones meteorológicas vuelvan a ser las habituales en esta época del año".