España afronta como muchos sabemos, diversos problemas graves para la seguridad nacional, algunos más conocidos y otros en menor detalle, los principales son las amenazas terroristas, los ciberataques, la actividad de grupos criminales transnacionales y sin la menor duda los problemas internos que pongan en peligro la integridad territorial del país. Muy importante este último punto para asumir que la intentona de golpe de Estado del 1-O de 2017 en Cataluña fue uno de esos hechos que podía afectar gravemente a está cuestión. Por lo tanto, entra dentro de la lógica que algunos líderes golpistas del separatismo fueran investigados por el CNI, con previa autorización del Supremo, precisamente para prevenir más tensiones y una fractura de España, al igual que otros Cuerpos y Fuerzas del Estado colaboraron en esa tarea profesional.

Sin embargo, el separatismo catalán ahora años después y con un informe sesgado y falto de pruebas intenta desprestigiar al CNI haciéndose la víctima, cuando Cataluña se ha llenado de espías por ser una zona convulsa en Europa, gracias entre otras razones al caos que han generado los últimos gobiernos de la Generalitat de Cataluña y que realmente han llevado incluso a que se rompan familias españolas por temas políticos.

Además, recordemos que por ejemplo se montó un CNI catalán paralelo y precisamente por está razón la inteligencia española también tuvo investigarlo. Hay que recordar también, que quién hace el informe de Pegasus para los separatistas, es Elíes Campos, que trabajó dos años antes para la Generalitat y estuvo vinculado a ese contraespionaje que desarrolló la Generalitat al margen del estatal. CDR reconocieron que trabajaron para el mismo.

Por lo tanto, por más que intenten desviar los serios problemas que afronta Cataluña por temas como éste, el CNI seguirá siendo uno de los servicios de inteligencia mejores en el Mundo.

En definitiva, lo raro hubiera sido que no hubiera hecho nada el CNI para frenar los delitos del golpismo secesionista. Que desde luego no han sido pocos y a los hechos me remito.