Vamos de cabeza a las elecciones y, de forma interesada, se sigue incrementando el nivel de tensión social y de presión al ciudadano, con la única intención de que este deposite su voto con el calentón de “destruyen España” o “que viene la derecha”, según se ponga el foco.

Que hasta ahora los políticos nos han engañado, es una obviedad que incluso reconocen ellos desde que Guerra dijo que en las elecciones se hacían ofertas que se sabía no se iban a cumplir; pero, a los dos grandes partidos los hemos pillado con el carrito del helado después de muchos años, siendo lo grave que los que vienen nuevos, los que se supone vienen a regenerar, limpiar y hacer las cosas de otro modo, ya nos engañan, nos mienten y nos roban antes de haber llegado.

Que el PP estaba repleto de corrupción y sus cambios han sido muy pequeñitos, no lo voy a discutir; que el PSOE no cambia sus modos y tiene corrupción con la formación y los ERE, no puede ocultarse; pero, lo grave es que en Cs no te dicen lo que van a hacer o te engañan para hacer lo contrario después; que en PODEMOS venían a limpiar y se compraron un casoplón en Galapagar, traían el dinero de Venezuela e Irán; que en VOX se dedican a ponerse hasta 4 sueldos públicos, a llevarse las subvenciones que querían quitar, a salvar la economía del país pero ellos se han arruinado, han trabajado sin titulación y han vivido de papá o de la política desde antes de nacer.

Si unos nos han robado y engañado con los años y otros nos engañan antes de empezar, miedo me da lo que harán estos nuevos valientes cuando lleguen a tocar pelo.

Es el momento de no mirar para los lados y, en estas elecciones, votar a aquel que permita la victoria electoral de unos u otros, con arcadas, con angustia vital, al borde del infarto, pero votar para desanclar la situación, ya llegará el momento de pasar facturas, de pedir responsabilidades, de limpiar la política y exigir que la palabra y su cumplimiento sea lo importante, que el que acuda a la política lo haga a servir y no a servirse y con un curriculum real que aportar.   No permitamos que los exacerbados sentimientos nos lleven a dar poder a personajes que utilizan esas banderas en su beneficio, no demos la razón a los que utilizan las momias para enfrentarnos, a los que acusan al vecino con más mierda en sus bolsillos, a los que acusan de insensibilidad para llevarnos a la ruina, evaluemos quiénes pueden llegar al gobierno de verdad y aupémoslos, sin tirar el voto en glorias futuras que sólo lo serán para ellos.

Ladrones, drogadictos, estafadores, muertos de hambre y desgarramantas, acuden a los nuevos partidos a pillar cacho colocándose tras un líder con coleta, barba o aseadito, que te dice lo que quieres oír para que esas hordas que les siguen se coloquen y les importe un pito el ciudadano, su líder y lo que le pase a España… ellos ya pillaron.

Rebaja el nivel de tensión que ellos te aplican para que, calentito y obnubilado, les votes; fíjate en ellos, sin presión; comprueba lo que dicen y evalúa lo que hacen y, después, valora quién es el que realmente puede gobernar y desatascar la situación, desde la derecha o desde la izquierda, y quién puede sacarnos del agujero en el que estamos, y vota, utiliza tu voto para después exigirles seriedad, solvencia, coherencia y palabra.