Marta Sitjá, presidenta de CircoRed. CircoRed
El circo pelea por ser algo más que una carpa itinerante y pide una categoría profesional: "Hace bastante que hemos cambiado"
Desde CircoRed piden medidas para evitar la "fuga de talentos". En Castilla y León hay una veintena de compañías profesionales.
Más información: El LAVA, donde tradición y vanguardia se dan la mano en Valladolid: citas únicas para disfrutar de la mejor cultura
El circo vive un buen momento en España. Aumenta el número de compañías y de espectáculos que se programan por todo el país en festivales y salas. Sin embargo, el artista de circo no es considerado un profesional de las artes escénicas.
"Un artista de circo no tiene nada, yo no tengo ni puedo tener un título". Lo dice Marta Sitjà, presidenta de la Federación Estatal de Profesionales de Circo (CircoRed). El sector se reúne esta semana en León y Ponferrada para celebrar su encuentro nacional que incluye formación, espectáculos y debates sobre las necesidades de las compañías.
Una de las reivindicaciones más repetidas es la que trabaja por conseguir una categoría profesional para el circo. Explica Sitjá "que se ha avanzado bastante, porque por suerte y por el trabajo que hemos hecho, hemos entrado dentro de la ley artística, porque el circo no entraba".
Al no existir una titulación reconocida, no hay formación reglada para el artista de circo. Asegura la presidenta de la Federación Estatal de Profesionales de Circo que "hasta que no haya titulación no seremos profesionales del todo". Esta carencia que tiene nuestro país no existe en otros lugares de Europa lo que provoca "una fuga de talentos, todo el mundo se tiene que ir a estudiar a Francia, a Bélgica, a Alemania, a Londres".
Durante el congreso CircoRed se está presentando el Marco Estratégico que el sector quiere desarrollar junto a las administraciones y las escuelas formativas. Queda un trabajo de años para hacer realidad esa aspiración según confiesa Marta Sitjá. "Se está hablando de un calendario 2025-2030".
Legislar la formación del circo es la única forma de que estos artistas puedan equipararse a los del resto de artes escénicas. Piden que el Estatuto del Artista, que reivindican desde hace años todas la artes escénicas, contemple un régimen especial para ellos. "No trabajamos todos los días, es imposible trabajar todos los días. Somos temporeros, igual que podrían ser las trabajadoras del campo. Que se acepte la intermitencia de trabajo, estas altas y bajas".
La falta de una enseñanza reglada complica realizar una radiografía exacta del sector. CircoRed trabaja en un censo estatal, pero todavía no han logrado unas cifras completas.
Salir de la carpa
Desde la Federación Estatal de Profesionales de Circo consideran que es ya es el momento de que la sociedad cambie la imagen que tiene de este tipo de espectáculo. "Todavía se vincula mucho el circo a la carpa de circo, a las familias de circo, al circo tradicional, cuando ya hace bastante que hemos cambiado".
El circo contemporáneo es mucho más que lo que ocurre bajo las carpas tradicionales. Explica Sitjà como "ya hay muchas compañías más teatrales que tienen una dramaturgia detrás, que están muy vinculadas con la danza, con la música".
Para el presidente de la Asociación de Profesionales del Circo de Castilla y León (CCLAP), Marcos Rivas Farpón, la evolución de estos espectáculos se demuestra en que no solo son propuestas familiares. También existen otro tipo de montajes para adultos o con más carga social.
"La gente está descubriendo que hay mucha variedad dentro de los estilos que presentan las compañías. Va a haber un estilo que va a ser para ti, que te va a gustar. Igual que ocurre con la música, igual que ocurre con el cine".
Añade Rivas Farpón que "hay circo que son espectáculos de entretenimiento, hay cosas más poéticas, hay un gran abanico y eso hace que la gente esté encontrando el estilo que le gusta y demandándole".
El circo en Castilla y León
Tampoco es posible cerrar un número de las personas que se dedican a las artes circenses en Castilla y León. Desde CCLAP cuantifican una veintena de compañías y cinco escuelas de formación en la comunidad autónoma.
"Es gente que se dedica exclusivamente y profesionalmente al circo. Es su modo de vida, su profesión, ya sea tanto la docencia como creando espectáculos y también combinando ambas cosas", asegura el Marcos Rivas Farpón.
El circo en Castilla y León también pasa por un buen momento, por una etapa "de expansión" donde cada vez hay más compañías profesionales. Viven un aumento de la demanda de sus espectáculos "para programaciones tanto en la calle, en festivales exclusivos de artes escénicas en la calle y también para ayuntamientos y para teatros".
Sin embargo, solicitan que el circo sea tratado por los programadores y gestores culturales como el resto de artes escénicas. El presidente de CCLAP cree que "falta un circuito estable, que se incluyan las programaciones de circo de una manera equitativa al resto de las artes escénicas que se presentan sobre todo en sala".
Porque las salas y los teatros son el espacio idóneo para el nuevo circo contemporáneo que propone espectáculos para adultos o menos familiares que además de artes circenses incluyen danza, música en directo o video proyecciones.
La presidenta de la federación nacional anima a los jóvenes apasionados por el circo a ayudar en la lucha por mejorar sus condiciones laborales y su estatus dentro de las artes escénicas. Marta Sitjá aconseja "que sigan, que sigan, por supuesto, que es un oficio muy maravilloso, que pueden vivir de eso".
Pero que no dejen de apoyar al sector porque "cuantos más socios seamos, cuanto más hagamos juntos, más red podemos hacer, más trabajo sacaremos de aquí y más dignidad tendremos".