El programa número 9 de la quinta edición de MasterChef Celebrity empezó con un bingo. En la entrega de anoche, los concursantes debían rellenar un cartón con ingredientes que saldrían al azar, y los primeros en cantar línea y bingo tendrían ventajas sobre sus rivales. Ahí el azar sonrió a Celia Villalobos, que supo sacar provecho de su ventaja y cocinó el mejor plato de la primera prueba, lo que le valía el delantal dorado, es decir, la salvación de la prueba de eliminación.

En esa primera prueba los aspirantes recibían la visita de amigos, que debían catar y valorar a ciegas sus elaboraciones. Ahí las redes volvieron a estallar en críticas hacia el programa pues, de nuevo, no se respetaron las distancias sociales, y aunque hubo algunos más comedidos como Josie, otros como la Terremoto de Alcorcón no pudieron reprimir los besos y abrazos a sus seres queridos.

Después, en la prueba en exteriores, los aspirantes contaron con la ayuda de Luna y Alberto, de la anterior edición de anónimos, y cocinaron unos menús de vanguardia en Las Ramblas de Barcelona; otra prueba que levantó ampollas pues los concursantes y algunos vendedores del mercado de la Boquería llevaban mal puesta la mascarilla, por la nariz por fuera.

Ahí el equipo peor valorado fue el rojo, lo que llevó a la prueba de expulsión a Josie, Gonzalo Miró, Nicolás Coronado y La Terremoto de Alcorcón, quienes debían cocinar trufas y bombones.

Fue en esa prueba final, en la que acudió como invitada la cantante Lolita, donde flaqueó Gonzalo Miró, uno de los concursantes favoritos para ganar la edición y cuya disciplina y buen hacer había sorprendido en multitud de ocasiones al jurado y a sus propios compañeros. Por pequeños detalles, los jueces lo elegían para abandonar las cocinas.

“Es una pena que no pueda ver el programa, porque estoy seguro de que se iba a reír mucho”, dijo al despedirse del concurso, en referencia a su madre Pilar Miró. “Echo la vista para atrás y veo que he hecho pasta, esferificaciones, helado con nitrógeno, bombones y trufas. Si me llegas a decir esto hace dos meses, que no había cogido una sartén en mi vida, pues te hubiera tomado por loco”, reflexionó también en su despedida, señalando que además le gustaría ver en la final a Florentino Fernández y a Ainhoa Arteta reflexionó.