¿Os acordáis de esa amiga de la Universidad de Meredith Grey que la llamaba “Muerte”? La que dejó que la operaran sus compañeros internos de una apendicitis que no tenía y que casi la matan. La que había falsificado sus notas para entrar en el Seattle Grace. Esa misma, o más bien la actriz que la interpretaba, Melissa George es la protagonista ahora de su propio drama médico en televisión, Heartbeat, que puedes ver los domingos a las 22.15 es Cosmopolitan.

Las comparaciones con Anatomía de Grey son imposibles de evitar. Y aunque ni tiene el enganche ni la fuerza de la serie de Shonda Rymes, hay algo que Heartbeat tiene y que Grey no ha tenido ni tendrá nunca: sentido de la moda. Porque si a Anatomía de Grey le faltaba algo (entre tantos doctores perfectos y dramas por un tubo) era eso, que nos dejarán ver cómo vestían sus protagonistas fuera del hospital. Si es que había vida fuera más allá del Joe’s – en el que todo estaba tan oscuro que no se podía distinguir lo que llevaban puesto-. Los diseñadores de vestuario y todas las personas sensibles al significado de la indumentaria y la moda necesitan ver los estilismos de un personaje para comprenderle al completo.

En Heartbeat (basada en la historia real de la doctora Kathy Magliato) vemos momentazos que en el actual Grey Sloan Memorial jamás han sucedido. ¿Cirujanas con el pijama y una cazadora perfecto de cuero? ¡Por favor, necesito más! El personaje protagonista se llama Alex Panttiere, una especialista en transplantes del corazón, que corre por los pasillos con tacones de más de 10 centímetros.

Una auténtica heroína. Surrealista, sí, pero ¿por qué no? Bajo la bata, además, adivinamos el estilo atrevido y femenino de una mujer de armas tomar dentro y fuera del quirófano. Una que tendrá que enfrentarse a una vida privada casi tan complicada como los adelantos quirúrgicos que propone. Ex marido gay, dos hijos, un novio guapísimo e ideal (Justin en Cinco Hermanos, Dave Annable) y un ex y jefe por el que aún parece sentir algo y con el que el amor-odio traerá cola…

Y aunque no deja de ser una serie de historias de hospital, se nota el progresivo cuidado y atención que vienen recibiendo los departamentos de vestuario de las series. Lleva años demostrándose que no hace falta ser una ficción de época ni tampoco una protagonizada por Sarah Jessica Parker para que el vestuario se cuide, funcione y aporte a la producción para conseguir un producto final redondo, creíble y ¿por qué no estéticamente apetecible? La diseñadora de vestuario encargada de la serie es Jill Ohannesson, la misma que hizo maravillas con Revenge y que actualmente trabaja también en Outlander.

Su futuro ya está sentenciado y no tendrá segunda temporada en NBC. Mientras, en Cosmopolitan, puedes disfrutar de los primeros episodios y dejarte embaucar por esta cirujana que, como Meredith Grey, no sabe seguir las normas ni se deja llevar por esa línea que divide lo que está bien o permitido y lo que está mal o prohibido.