TardeAR ha comenzado el programa de este martes con todos sus ojos puestos en José María Almoguera, el hijo de Carmen Borrego. Y es que este trabajador de la productora Cuarzo no hay día que no protagonice nuevas informaciones, y todo desde que dio una entrevista a la revista Semana en la que dejaba en mal lugar a su madre.

Tras dar la bienvenida a los colaboradores, entre los que se encontraba Javier Sardà, Frank Blanco, Beatriz Archidona, Ana Brito y Cristina Cifuentes, Ana Rosa Quintana cedía todo el protagonismo a otro compañero, Miguel Ángel Nicolás. “Yo solo vengo cuando hay bombazos de los grandes”, advertía Nicolás.

Fue entonces cuando Miguel Ángel expuso que hay “entrevista bomba”, concedida por alguien de la familia Campos. Una persona que cuenta que José María Almoguera fue “expulsado de casa. ¿De quién? De una de estas cuatro mujeres”, introducía. Así, los espectadores pudieron ver en una pantalla a María Teresa Campos, a Terelu Campos, a Carmen Borrego y a Paola Olmedo, la ya expareja de Almoguera. “A lo largo de la tarde iremos descartando posibles candidatos y descubriremos qué ha pasado y cómo fue”, proponía Miguel Ángel.

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Y no solo eso, para calentar el tema que traía entre manos, invitó a los presentes a apostar. Algo que no gustó nada Ana Rosa Quintana, que no dudó en frenarle. “Eso de jugar con dinero es muy feo”, le apuntaba la presentadora. Y, volviendo al tema, la comunicadora de Usera añadía que hay cuatro casas. “¿Es la que todos esperamos que sea?”, preguntaba.

“No sé la que tú te esperas…”, le respondía Miguel Ángel Nicolás, que pedía a todos los colaboradores que se mojasen. Así, había algunas personas que decían que sería de la casa de María Teresa Campos, y otros, que de Carmen Borrego. Ana Rosa Quintana vaticinaba que habría sido de la casa de su mujer, y Frank Blanco dijo Terelu, simplemente, porque nadie más la eligió. “Terelu, por lo que yo sé, no sé si saldrá hoy, tendría motivos”, lanzaba entonces Ana Rosa.

Nicolás volvía a tomar la palabra para adelantar que en “un ratito” se descartaría a una de las cuatro personas de la pantalla. “Te pido un favor, Miguel Ángel. No nos hagas esto de guardarlo para tu sección. Antes de que termine esta mesa algún dato tienes que dar”, le exigía la presentadora. “Vale, me has convencido”, terminaba de decir Nicolás, quien suele aparecer en el tramo final del programa, en el que se tratan los asuntos de corazón.