Imagen del primer programa de 'Mental Masters'.

Imagen del primer programa de 'Mental Masters'.

Bluper

La experiencia inmersiva de 'Mental Masters': así funciona el nuevo concurso de Telecinco desde dentro

BLUPER ha tenido la oportunidad de disfrutar de la mecánica del nuevo concurso de Telecinco que se estrena este 25 de marzo en prime time.

25 marzo, 2024 01:06

Este lunes 25 de marzo, a las 22:50 horas, Telecinco estrena una de sus grandes novedades de este año para su prime time, el quiz show Mental Masters. Adaptación del exitoso concurso estadounidense Mental Samurai, Carlos Sobera se convierte en el maestro de ceremonia de este formato que, en la versión española, tendrá a famosos como participantes.

BLUPER ha tenido la oportunidad de probar la mecánica, al sentarse en la silla de ADDA, un espectacular brazo robótico con voz propia que transporta al concursante en una cápsula que se mueve en el aire a gran velocidad, girando rápidamente e, incluso, poniéndose boca abajo en vertiginosos desplazamientos por todo el plató, a la vez que se reciben diferentes estímulos visuales y sonoros.

Una mezcla de vértigo, inteligencia, concentración, agudeza visual, destreza, agilidad mental y mucho humor. Realmente, las preguntas son sencillas y no requieren de un gran esfuerzo responderlas. Ahora bien, la clave no está ahí sino en cómo ADDA mueve al participante, como si estuviera en una especie de montaña rusa. Eso termina desconcentrando, con el agregado de saber que se está en un concurso de televisión.

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De ahí, que una pregunta tan sencilla como la del parentesco entre Carlos III de Inglaterra y la fallecida reina Isabel II puede provocar que se gasten segundos en pensar en una respuesta que se tardarían milésimas en responder. Ahí está la gracia, así puede verse en pruebas que no son de cultura general, otras preguntas sobre memoria o agudeza visual, de esas que obligan a prestar atención a una imagen, son más complicadas de responder de después haber dado un giro de 360 grados.

Porque ADDA penaliza los errores, sólo se permiten dos, en rondas de siete minutos. Con lo cual, el añadido de estar pendiente del reloj hace que la adrenalina pueda subir con preguntas aparentemente sencillas. Creado por Arthur Smith y Mike Darnell, el concurso sabe crear tensión en sus mecánicas de manera familiar. Ahí también está otra clave, sus fáciles preguntas invitarán al público a participar desde sus casas.

Imagen del primer programa de 'Mental Masters'.

Imagen del primer programa de 'Mental Masters'.

Un formato pensado para el disfrute de toda la familia

Sensación de adrenalina en la que el presentador juega otro papel esencial. Los momentos de humor los pone el conductor, quien tiene que lanzar comentarios ingeniosos que dependen de las reacciones del concursante. Luego está ADDA, el brazo mecánico que también habla. Se trata de una sofisticada máquina que combina ingeniería de alta precisión con un potente software, ambos creados concretamente para este formato.

Producido el concurso por Mediaset España junto con Warner Bros. ITVP España, su espíritu familiar evoca ese toque que triunfa en otros formatos como Atrapa un millón, Reacción en cadena o Alla tú, pero con el agregado de una dosis de adrenalina que permite ver la reacción espontánea de los participantes.

Vídeo de la experiencia inmersiva en el concurso 'Mental Masters'

Ese punto ha quedado por ver en la visita de BLUPER al plató del quiz show y es que el programa se ha guardado las reacciones espontáneas de los famosos que concursarán. Para la primera entrega, los perfiles no podían ser más distintos: Santiago Segura, Leticia Dolera, Paco Tous, Kira Miró, Rosa López y Eduardo Casanova.

Y es que sus reacciones ante la tal cantidad de movimientos que hace ADDA serán, sin duda, fuente para memes y vídeos virales para redes sociales. Sin duda, en ese giro hacia una televisión más cercana al entretenimiento familiar, Mental Masters puede aspirar a ser un formato que, al menos, librará batalla y muestra cómo es posible que, entre tanto regreso de concursos míticos, una apuesta nueva siempre venga bien.