El pueblo medieval abandonado cerca de Zaragoza con más de 1.000 años de historia: perfecto para una escapada

El pueblo medieval abandonado cerca de Zaragoza con más de 1.000 años de historia: perfecto para una escapada Turismo de Aragón

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El pueblo medieval abandonado cerca de Zaragoza con más de 1.000 años de historia: perfecto para una escapada

El pueblo medieval, declarado Bien de Interés Cultural, conserva una iglesia del siglo XII con frescos, y un puente romano.

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Zaragoza
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Aragón nunca deja de sorprendernos. Naturaleza, gastronomía, cultura e historia se dan la mano en esta preciosa comunidad. Huesca es la provincia con más estrellas Michelín de España, y Teruel acoge el mayor número de pueblos declarados de los más bonitos del país.

Zaragoza, por su parte, acoge un buen número de monumentos visitados por miles de turistas cada año, siendo la Basílica del Pilar de los más reconocidos de la ciudad. Por otro lado, la capital aragonesa es un punto de partida ideal para visitar pueblos medievales que, abandonados hace tiempo, mantienen viva la historia y son perfectos para una escapada rural.

Enclavado en el corazón de la comarca de la Ribagorza cerca Zaragoza capital, Montañana es una villa medieval que ha sido declarada Conjunto histórico-artístico y Bien de Interés Cultural. Este pueblo, ahora abandonado, conserva una arquitectura única que lo convierte en un destino ideal para quienes buscan una escapada tranquila y llena de historia.

Pueblo medieval abandonado

Montañana, con más de mil años de historia, fue en su día un importante enclave comercial y defensivo en el Pirineo.

La villa cuenta con tres iglesias románicas, los restos de dos castillos y un puente medieval de doble arcada que es el emblema del pueblo. Al cruzarlo, sentirás que te sumerges en el medievo.

Iglesia de Montañana.

Iglesia de Montañana. Turismo de Aragón

La monumental iglesia de Nuestra Señora de Baldós, del siglo XII, destaca por su imponente campanario del siglo XIII y su portada decorada con tímpanos y capiteles tallados.

Además, conserva frescos góticos del siglo XIV, un detalle que no pasa desapercibido para los amantes del arte y la historia. Otros puntos destacados son la torre de la Cárcel y la ermita de San Juan, que completan un paseo que mezcla historia y naturaleza.

¿Por qué quedó abandonado?

Como muchas otras villas medievales, Montañana sufrió una despoblación gradual durante el siglo XX debido al éxodo rural.

La dificultad de acceso y la falta de oportunidades económicas hicieron que sus habitantes buscaran mejores condiciones de vida en las ciudades.

Sin embargo, gracias a un proyecto de restauración iniciado en 1999 por el Gobierno de Aragón, Montañana ha recuperado parte de su esplendor, atrayendo a turistas y visitantes en busca de tranquilidad y belleza histórica.

El pueblo está muy bien conservado, y según la pagina web de Turismo de Aragón, se hacen visitas guiadas durante los meses estivales, más información de las reservas aquí.

Qué hacer en Montañana

La mejor manera de conocer la villa es a través de las visitas guiadas que organiza la oficina de turismo. Expertos locales te llevarán por las calles empedradas, las iglesias y las antiguas fortificaciones mientras narran la fascinante historia de Montañana.

De todas formas, aunque no se vaya con guía turístico, pasear por las calles empedradas del pueblo abandonado es todo un disfrute. Sus muros, sus casas y todo el entorno susurran que allí, entre esas paredes, hace miles de años vivían nuestros antepasados.

Una familia en Montañana.

Una familia en Montañana. Turismo de Aragón

Pasear y dejar volar la imaginación por las calles de Montañana es un plan perfecto para una escapada, pero si se quieren hacer más actividades, los alrededores ofrecen muchas oportunidades.

  • Senderismo y naturaleza: Los alrededores del pueblo ofrecen rutas senderistas ideales para toda la familia. Una de las más recomendadas lleva a un mirador natural desde donde se pueden apreciar las mejores vistas del caserío y el entorno montañoso.

  • Gastronomía local: En los alrededores de Montañana, puedes encontrar restaurantes típicos que sirven especialidades de la región, como guisos de cordero y migas. Destacan opciones en localidades cercanas como Benabarre o El Puente de Montañana, donde también podrás disfrutar de productos locales como quesos y embutidos.

Cómo llegar a Montañana

Una vez decididos a hacer una escapada a este pueblo abandonado, llegar a Montañana es sencillo siguiendo estas indicaciones:

Desde Zaragoza, toma la N-II hacia Huesca y luego sigue por la A-22 hacia Barbastro. Desde allí, dirígete a Benabarre y, posteriormente, a El Puente de Montañana.


Una vez en El Puente de Montañana, hay un desvío señalado a la izquierda que conduce a Montañana. El trayecto final es una carretera estrecha pero en buen estado.

Desde Zaragoza en coche se tardan unas dos horas y cuarto, por lo que la visita merece la pena dentro de una escapada, para disfrutar con calma del pueblo medieval y de los alrededores.

¿Montañana es apto para toda la familia?

Sí, Montañana es un destino tranquilo y seguro para visitar con niños y mascotas. Los pequeños disfrutarán explorando las calles medievales y corriendo por los senderos naturales, mientras que las mascotas encontrarán un entorno ideal para pasear. Eso sí, es recomendable llevar calzado cómodo y agua, especialmente en los meses de verano.

Montañana es mucho más que un pueblo abandonado; es un viaje en el tiempo que combina historia, naturaleza y tranquilidad. Perfecto para una escapada desde Zaragoza o cualquier punto de Aragón, este destino medieval ofrece una experiencia única para quienes buscan desconectar y conectar con el pasado.

Busca un hueco en tu calendario para descubrir este rincón único del Pirineo aragonés. Montañana te espera con sus calles de piedra, su imponente patrimonio histórico y su entorno natural incomparable.