La unidad USECIC de la Guardia Civil en Caspe Guardia Civil
La Guardia Civil pilla al autor de múltiples robos en Caspe (Zaragoza): mordió y golpeó a los agentes intentando huir
La localidad zaragozana lleva los últimos meses pidiendo un refuerzo de agentes de la Guardia Civil ante la criminalidad presente en sus calles.
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La localidad de Caspe se vio asolada ante la oleada de robos que se estaba produciendo en los locales comerciales en los últimos meses. Vecinos y comerciantes se concentraron y cerraron sus comercios para pedir una mayor seguridad y un número superior de efectivos de la Guardia Civil ya que muchos de los comercios se habían visto afectados por robos. Asimismo, su alcaldesa, Ana Jarque, ha reiterado en varias ocasiones al ministro del Interior una mayor protección con un aumento de agentes.
Después de meses de incertidumbre y cierto desasosiego por parte de sus vecinos ante la comisión de estos delitos sin determinar sus autores parece que ya pueden dormir más tranquilos. La Guardia Civil y Equipo Roca de Caspe ha detenido a un hombre, de nacionalidad marroquí, como presunto autor de casi una veintena de delitos, cometidos todos ellos en la localidad zaragozana.
La investigación se inició en noviembre tras la comisión de varios robos en establecimientos y viviendas de la localidad en los que se sustrajo dinero, comida y bebidas alcohólicas. Del estudio de la información recabada en los ilícitos, la Guardia Civil pudo determinar que se habrían efectuado por la misma persona y con el mismo modus operandi, tratándose de un varón de nacionalidad marroquí, que residiría en Caspe, cambiando de vivienda de manera continuada.
Según señala un comunicado de la Guardia Civil, durante la investigación se tuvo conocimiento de que el sospechoso habría abandonado la ciudad a finales de enero, momento en el que cesaron los inícitos de similares características a los cometidos anteriormente.
A golpes y mordiscos
Fruto de este operativo, la madrugada del día 16 de marzo se recibió un aviso en la central de emergencias de Guardia Civil (062), comunicando que una persona de origen marroquí acababa de acceder a un domicilio en Caspe, correspondiéndose sus características con las del varón que estaba siendo investigado.
De inmediato se desplazó al citado inmueble una patrulla de seguridad ciudadana donde, en presencia de la moradora, se efectuó un registro de la vivienda. En el instante en el que se estaba verificando el interior del domicilio, el sospechoso apareció de detrás de una puerta abalanzándose sobre uno de los agentes al que trató de agredir con un objeto punzante, no logrando su objetivo gracias a la rápida reacción de los dos efectivos. Durante el forcejeo esta persona se mostró con una elevada agresividad, propinando golpes y mordiscos a los agentes, consiguiendo huir del lugar.
Desde ese momento se estableció un dispositivo de búsqueda del sospechoso, en el que participaron patrullas de diversas Unidades, y que finalizó con su localización en el interior de una vivienda a la que habría accedido y amenazado al morador para permanecer en dicho lugar. Esta persona, al percatarse de la presencia policial por la zona, trató de huir a través del tejado por las viviendas aledañas, pero fue detenido poco después por la Guardia Civil.
No actuaba solo
El detenido, un varón de nacionalidad marroquí, 32 años, con un historial delictivo numeroso, quedó a disposición judicial el día 18 de marzo, imputándole un total de 14 delitos de robo con fuerza en las cosas, un delito de robo en grado de tentativa, un delito de amenazas y otro de Atentado a Agente de la Autoridad, decretándose su ingreso en el Centro Penitenciario de Zuera.
Continuando con la investigación, el día 19 de marzo se procedió a la detención de la mujer, moradora de la vivienda donde fue localizado el detenido la madrugada del 16 de marzo, como cooperadora necesaria de estos ilícitos. Y, durante el día de ayer, la Guardia Civil detuvo a un varón en Caspe, español de 39 años, relacionado con estos mismos hechos, al que se le imputaron delito de amenazas y allanamiento de morada, además de otros dos delitos de robo con fuerza cometidos en Maella y Alcañiz.