Taller de baterías de Stellantis en Figueruelas

Taller de baterías de Stellantis en Figueruelas Raúl Gascón

Economía

La fábrica de Stellantis se prepara para el gran desembarco chino: "La mitad de la plantilla ya sabe decir 'ni hao'"

La planta de Figueruelas ya se adapta a la llegada de modelos y trabajadores de China en el próximo año. 

Las obras en una de las líneas y la incertidumbre de la automoción a nivel mundial han llevado a Figueruelas a un 2025 con menor producción.

Más información: La china Leapmotor confirma que fabricará en Zaragoza el B10 desde 2026 y otros tres modelos a partir de 2027

Zaragoza
Publicada

La fábrica de Stellantis en Figueruelas atraviesa un nuevo bache en su producción, golpeada por la caída global de la automoción en plena transición a los vehículos eléctricos. En medio de este panorama, la planta aragonesa se enfrenta a ajustes en su ritmo de fabricación, cambios en el calendario y desafíos que podrían marcar el rumbo de su actividad en los próximos meses.

Mientras espera el gran desembarco chino, tanto de trabajadores como de nuevos modelos eléctricos, la fábrica zaragozana está viendo reducidos sus niveles de producción, cerrando el año con unos 300.000 vehículos, casi una cuarta parte menos que en 2024. Y las previsiones no son halagüeñas para 2026, ya que todavía podría caer todavía más.

Pero en la planta se respira tranquilidad, conscientes de que este bache está sacudiendo a toda la automoción a nivel mundial y las perspectivas más a largo plazo invitan al optimismo, como reseñan desde el Comité de Empresa. De hecho, se había acordado un ERTE para 2025 para usarlo en caso de necesidad, aunque finalmente no se ha utilizado.

Además, la planta de Figueruelas tiene parada desde octubre su línea 1 por obras para instalar la plataforma STLA Small, que permitirá seguir produciendo las nuevas generaciones de coches eléctricos en el futuro una vez que finalice la vida útil de los actuales modelos.

Actualmente, desde la fábrica de la Ribera Alta del Ebro se ensamblan el Peugeot 208, Opel Corsa y el Lancia Ypsilon, con versiones eléctricas y de combustión.

Para este año, está previsto que la compañía inicie los trabajos de la línea 2 sobre finales de febrero y principios de marzo, aunque todo dependerá de cómo avancen las obras de la 1. Ello podría llegar a generar algunas tensiones a principios de año, aunque no tienen dudas de que, a la larga, traerá grandes noticias para Figueruelas.

“Si se cumple todo lo que se ha anunciado de puertas para afuera, podríamos tener un principio de año sacrificado, pero esperamos no tener que tirar del ERTE para cumplir las expectativas de producción de una forma razonable. El primer semestre será duro, pero tienen que venir proyectos y pruebas”, señalan los distintos sindicatos del Comité.

Será en esta línea donde se comiencen a fabricar los vehículos de Leapmotor. Pese a que Stellantis se resiste a confirmar la producción de estos modelos, desde el Comité de Empresa celebran las posibles adjudicaciones que puedan llegar en próximos años. “Lo que llegue, lo haremos”, remarcan desde el Comité.

Y es que 2026 estará marcado en rojo como el inicio de la colaboración de Figueruelas y China, ya que se espera que en el cuatro trimestre se comience a fabricar el B10 de Leapmotor, tal y como se anunció la pasada semana en la visita de directivos de la empresa china a Borja. Las previsiones iniciales apuntan a 40.000 vehículos en un año completo, aunque la evolución estará marcada por la respuesta del mercado.

Mientras, en la planta se respira expectación con las posibles novedades que llegan de China, e incluso algún trabajador ya se empieza a sumergir en su cultura. “No estamos aprendiendo chino, pero, por educación, yo creo que la mitad de la fábrica ya sabe decir ‘ni hao’”, ironizan.