Exposición sobre cine doméstico de CaixaForum Zaragoza. CaixaForum
La memoria cotidiana se pone en valor en la nueva exposición sobre cine doméstico de CaixaForum Zaragoza
La muestra ‘Recuerdos. La vida a través del cine doméstico’ estará disponible del 28 de febrero al 8 de junio.
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Con el objetivo de reivindicar el cine doméstico como género y poner en valor aquellas memorias y recuerdos cotidianos que toda la sociedad guarda, nace la nueva exposición de CaixaForum en Zaragoza: ‘Recuerdos. La vida a través del cine doméstico’.
Es una muestra inédita que inicia su recorrido este viernes 28 de febrero en la capital aragonesa y que viajará a otros centros de España. En julio, tras despedirse de Zaragoza (hasta el 8 de junio), se inaugurará en Valencia.
La exposición se ha presentado este jueves con la participación del director de CaixaForum Zaragoza, Ricardo Alfós, junto a los comisarios de la exposición e investigadores, Efrén Cuevas y Nuria F. Rius. Así pues, esta surge de unos de sus proyectos de investigación y cuenta con la colaboración especial de los proyectos Destiladera: Lanzarote Revelado y Memorias Celuloides, la Filmoteca Española, la Fototeca de la Diputación de Huesca, la Filmoteca de Cataluña, entre otras instituciones.
La idea se propuso hace unos tres años como algo muy cercano a todos, pues en todas las familias se guardan esos recuerdos filmados, ya sea con una cámara o un móvil, de unas vacaciones o de un instante sencillo en el hogar. Todo eso es también cine y se quiere defender.
Desde hace más de un siglo, el cine doméstico ha capturado fragmentos de la vida cotidiana y se ha convertido en un archivo visual que recoge nuestra memoria colectiva. Por ello, en esta exposición se recuperan relatos y filmaciones inéditas que ofrecen una crónica alternativa de este siglo a través de las miradas de familias anónimas con las que todos podemos identificarnos.
En esta línea, Efrén Cuevas ha explicado que la muestra quiere poner en valor ese archivo, que es “patrimonio audiovisual”, así como mostrar la evolución en la forma de hacerlo.
Además, aunque hay gente que no entiende como esas grabaciones propias tienen valor para otros, el investigador ha señalado que eso es cine: “Es un cine no profesional, pero es más auténtico, con verdad y errores”.
Por otro lado, la exposición aborda 100 años de evolución tecnológica, desde los 16 mm hasta los teléfonos móviles, pasando por el super-8 y el VHS. Propone una revisión de los temas más frecuentes y sus aproximaciones. Explota su reutilización en las prácticas audiovisuales contemporáneas y su apropiación por parte de los cineastas actuales.
Finalmente, analiza cómo se entrelaza el cine doméstico con las prácticas comunicativas de las redes sociales e internet. En ese aspecto, los comisarios están seguros de que en el futuro seguiremos grabando, pero no se puede saber de qué manera, aludiendo a las tendencias cambiantes.
Una muestra dinámica
La exposición cuenta con gran diversidad de contenidos y una dinámica puesta en escena con diferentes ámbitos temáticos, seis en total. Desde la evolución tecnológica y social del cine doméstico a su preservación, pasando por el lenguaje, la actualidad…
En el centro hay un espacio que acoge dos audiovisuales producidos especialmente para la ocasión por el documentalista Salvi Vivancos. El público también se encontrará con películas domésticas cedidas por ciudadanos aragoneses y, según conoce Nuria F. Rius, podría haber sido la historia de cualquier vecino.