Los perros no podrán ir sueltos en algunos parques de Zaragoza a partir de septiembre: este es el motivo

A partir de septiembre, los perros solo podrán estar sueltos en las zonas específicas de esparcimiento canino dentro de los parques de Zaragoza. Esta iniciativa pretende mejorar la convivencia entre las propias mascotas y sus propietarios con el resto de usuarios de los parques y plazas, así como proteger y facilitar el mantenimiento tanto del arbolado como las zonas de césped y del resto del mobiliario urbano de estos espacios.

Así lo ha anunciado hoy la concejala de Medio Ambiente y Movilidad, Tatiana Gaudes, quien ha explicado que en los últimos años el Ayuntamiento ha llevado a cabo una “renovación integral” de numerosas zonas verdes, incluyendo la creación de espacios específicos para perros. Esta evolución ha llevado al Consistorio a establecer una separación clara de usos dentro de los parques, con el objetivo de mejorar la convivencia entre personas y animales.

"El espacio público es de todos", ha afirmado Gaudes, "y hay personas, como niños o mayores, que pueden sentirse más inseguras con perros sueltos". Por ese motivo, y puesto que ya hay zonas habilitadas para ellos, desde el Ayuntamiento consideran que el resto del parque debe reservarse para que "todos puedan disfrutar con tranquilidad".

Las primeras áreas en implementar esta normativa serán la Plaza de los Sitios, el Parque Royo del Rabal y el Parque de Miraflores, donde ya existen zonas de esparcimiento canino. En estos espacios, los perros solo podrán ir sueltos dentro de los recintos habilitados y vallados. En el resto del parque se requerirá que los animales vayan atados.

La decisión llega tras detectar "pequeños conflictos" en zonas compartidas. Gaudes ha defendido la iniciativa como un paso más hacia la convivencia cívica y ha subrayado que Zaragoza “ha mejorado notablemente” en los últimos años en cuanto a infraestructuras para mascotas. “Queremos seguir trabajando con los ciudadanos y con los dueños de mascotas para que todos se sientan seguros en los espacios verdes de la ciudad”, ha añadido.

Asimismo, Gaudes ha señalado que en los parques y plazas de la ciudad han detectado que "hay zonas de césped más deterioradas por el uso que hacen los animales y por los orines de los propios perros". Por lo tanto, desde el Consistorio consideran que esta medida busca también disminuir esas afecciones en los espacios públicos y fomentar el uso de las zonas habilitadas para los animales.

Señalización y futuras ampliaciones

La normativa entrará en vigor una vez esté debidamente señalizada. La concejala ha indicado que será en septiembre cuando se colocarán los carteles informativos en las tres zonas verdes mencionadas. Posteriormente, se actuará en otros espacios "más complejos" como el Parque Grande, donde se permitirá la suelta de perros en áreas amplias, pero no en zonas sensibles como la Rosarera o el Jardín Japonés.

En cuanto a las sanciones, Gaudes ha señalado que no serán inmediatas ni de gran cuantía, y que el objetivo es “informar y concienciar”. No obstante, la Policía Local podrá actuar si encuentra animales sueltos fuera de las zonas permitidas una vez entre en vigor la señalización.

El Ayuntamiento también contempla ampliar las zonas caninas dentro de futuras renovaciones urbanas. Según la concejala, esta planificación forma parte de un modelo de ciudad que "busca equilibrar las necesidades de las personas y los animales en los espacios públicos".