"Es como si a un conductor para sacarse el carné le hacen el examen médico por teléfono y con posterioridad a darle el permiso. Y mientras, varios meses dándose trompazos con el coche". Con estas palabras define el secretario general del Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana (CESM), Víctor Pedrera, la instrucción emitida por la secretaria autonómica de Salud Pública, Isaura Navarro (Compromís) con relación a la capacitación de los nuevos docentes en los centros de salud.

El CESM denuncia que desde la Conselleria de Sanidad se ha enviado a los centros de Atención Primaria instando a los médicos de Familia a cumplimentar certificados de aptitud y capacitación para puestos de trabajo del personal docente. "Certificados que se instan a cumplimentar sin la valoración pertinente de la persona solicitante".

Los facultativos señalan que realizar esas valoraciones, con las connotaciones legales que conllevan ya que deben dar fe de que profesor tiene las capacidades físicas y psicológicas requeridas, no se puede hacer vía telefónica sin la presencia de la persona a valorar.

Extracto de la instrucción de la secretaria autonómica Isaura Navarro.

"Se están obviando las implicaciones legales que tiene firmar por parte de un médico un certificado de aptitud", reiteran, al tiempo que denuncia una nueva sobrecarga de trabajo sobre el sistema de Atención Primaria que ya está saturado y al borde del colapso.

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Además, podrá ser aportado "con posterioridad al nombramiento" pero siempre "antes del 30 de junio de 2023", afirma la instrucción, por lo que un supuesto profesor con problemas psicológicos, por ejemplo, puede estar dando clases a los alumnos nueve meses antes de que un médico le pregunte por teléfono su situación.

La denuncia

"Desde el Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana exigimos a la Conselleria de Sanidad que tal como se acordó con las medidas de desburocratización de atención primaria dictadas por la Dirección General de Asistencia Sanitaria, que estos certificados, o no se soliciten, o si se considera que deben exigirse lo correcto es hacerlo de forma legal y adecuada", exponen.

Y sobre todo, "sin sobrecargar a los medios de Atención Primaria porque para ello disponen del servicio de medicina preventiva o las unidades de valoración, las cuales deben estar a cargo de la empresa solicitante del certificado, en este caso la Conselleria de Educación", insisten.

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"En caso de que se les obligue a los médicos, recordamos que esos certificados no son resúmenes del historial clínico, son certificados de capacitación y, por ello, recomendamos a nuestros compañeros que soliciten las pruebas o valoraciones que consideren necesarias para expedir dichos certificados de capacitación de forma reglamentaria", advierten desde el sindicato a los facultativos.

Además, y por último, el CESM denuncia "la descoordinación, una vez más, entre la Secretaría Autonómica (dependiente de Compromís) y el resto direcciones de la Conselleria de Sanidad (dependientes del PSPV) que continuamente abocan a emitir instrucciones contradictorias que siempre redundan negativamente en la sobrecarga y el buen funcionamiento, especialmente en el ámbito de Atención Primaria".