La consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha apostado por ampliar la atención a los menores huérfanos de violencia de género con un modelo de apoyo integral que incluyan programas de tratamiento terapéutico, la formación de especialistas en los centros educativos y una red de servicios especializados para atender a estos menores y a las familias que los acogen.

Bravo se ha pronunciado así durante la inauguración del Primer Encuentro de familias de víctimas mortales de violencia de género "Protección y reparación del daño de huérfanos y huérfanas" organizado por la Fundación Mujeres en Valencia.

Las jornadas están concebidas como un espacio de apoyo, de aprendizaje y de acompañamiento dirigido principalmente a las familias que se hacen cargo de estos menores y que son beneficiarias del Fondo de Becas Soledad Cazorla.

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La consellera ha denunciado que "el número de menores huérfanos por violencia de género en 2022 asciende a 26 y desde el 1 de enero de 2013 ese trágico balance asciende a 365".

"No podemos más que denunciar que son cifras inasumibles, estremecedoras e insoportables", ha añadido Bravo, al tiempo que ha defendido que en el camino de luchar contra el terrorismo machista "el Fondo de Becas Fiscal Soledad Cazorla Prieto tiene un papel esencial".

Bravo ha explicado que la Generalitat reconoce desde 2018 una indemnización de 75.000 euros a cada uno de los hijos de las mujeres asesinadas por violencia machista, con independencia de su edad y de si tenían o no dependencia económica de la víctima y ha apostado por "seguir fortaleciendo el ámbito de actuación y el escudo de protección con herramientas psicosociales".

Al respecto, ha avanzado que la Generalitat seguirá trabajando para ampliar los recursos de atención a las mujeres y para reforzar las medidas de asistencia y protección a los menores huérfanos que son víctimas de esta violencia. "La lucha institucional contra la violencia machista no termina tras los minutos de silencio, ni tras las portadas en los periódicos", ha afirmado.

El Fondo de Becas Fiscal Soledad Cazorla es un fondo de ayudas para el desarrollo personal, apoyo educativo y reparación de daño dirigido a niñas y a niños huérfanos a causa de la violencia machista. Está gestionado por la Fundación Mujeres desde su creación en 2016 y lleva el nombre de la que fuera primera fiscal de Sala contra la violencia sobre la mujer.