España vuelve a tener una capital verde europea más de una década después. Valencia se impone a sus rivales y consigue este reconocimiento de la Unión para ser ejemplo de políticas medioambientales en 2024. La capital de la Comunidad Valenciana será una de las mayores ciudades que han conseguido este título.

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha asegurado que la denominación es un compromiso para seguir trabajando en una ciudad "cada vez más verde, más sostenible y más amable con todos sus ciudadanos, sin dejar a nadie atrás".

La francesa Grenoble es la actual poseedora de este título honorífico con el que la Unión Europea pretende fomentar el ejemplo de la aplicación de las políticas medioambientales. Desde allí la delegación oficial valenciana ha celebrado la consecución de este reconocimiento con el que se imponen a la otra candidatura, la de la italiana Cagliari.

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Ribó ha señalado, como recoge Efe, que ya hay mucho trabajo hecho. Y por eso ha agradecido a los trabajadores de servicios, empresas, universidades y a todos los que han colaborado "el trabajo realizado, que ha estado bien hecho".

Al conocer que Valencia ha resultado ganadora, Ribó ha comenzado su intervención en el escenario acompañado de su equipo desde "la profunda emoción y satisfacción" por el premio y "la responsabilidad que conlleva".

"Estamos hoy aquí gracias a los valencianos que lucharon y ganaron por tener un Saler para el pueblo, un río Turia que sea un gran parque y un jardín donde antes era el espacio de Jesuitas. Gracias a ellos estamos aquí", ha manifestado en valenciano al auditorio.

El vicealcalde Sergi Campillo, que ha traducido al inglés la intervención del alcalde, ha acudido junto a la también vicealcaldesa Sandra Gómez a esta ceremonia. La Unión Europea apoya con seiscientos mil euros este título que en España solo había recaído una vez, en 2012 con Vitoria.

En la lista de las que han sido ganadoras hay tres capitales de Estado: Estocolmo, Copenhague y Lisboa. Con Valencia y Vitoria, España se suma a Alemania y Francia, los únicos países que han conseguido repetir este título. El valor de la candidatura de Valencia es el de demostrar la aplicación de políticas medioambientales en ciudades de tamaño medio después de ganadoras con una población mucho menor, como las propias Grenoble y Lahti, en Finlandia.

Los trabajos que se están aplicando ya en Valencia y los que se apliquen hasta 2024 serán tomados como modelo por el resto de técnicos europeos que se encargan de activar las medidas medioambientales.