El pleno de las Cortes valencianas tiene previsto aprobar este jueves una propuesta para instar a la Consell a crear una subvención destinada al sector turístico, para que los hoteles hagan mejoras ergonómicas que reduzcan la sobrecarga de trabajo de las camareras de piso, conocidas como las Kellys.

Así lo recoge una iniciativa de Compromís, cuya redacción final se ha consensuado con el grupo socialista, que se ha debatido este miércoles y que también plantea que estas ayudas deberán ser supervisadas y certificadas por el Invassat para disponer de la subvención.

Los establecimientos beneficiarios de estas ayudas no podrán incrementar la carga de trabajo a raíz de llevar a cabo estas mejoras ergonómicas y estructurales, y deberán tener planes de prevención y evaluación de riesgos en vigor, según señala el acuerdo.

La propuesta también plantea que el Consell impulse la modernización de las herramientas y maquinaria en sectores económicos donde las mujeres tienen una presencia mayoritaria y prima el trabajo físico, como camareras de piso, limpiadoras, encajadoras de cítricos, cuidadoras de la dependencia, trabajos en almacenes de baja temperatura, conservadoras de alimentación o reponedoras.

Aumento de la precariedad

La propuesta ha sido defendida por la diputada de Compromís Mónica Álvaro, quien ha señalado que las camareras de piso han reivindicando en los últimos años sus condiciones laborales ante la pérdida de derechos y el aumento de la precariedad de su trabajo, y que esta iniciativa les gusta tanto a ellas como al sector turístico.

La parlamentaria ha defendido la necesidad de seguir "reivindicando la igualdad laboral", y ha destacado que la precariedad y condiciones ergonómicas desfavorables se ceban "en los trabajos feminizados, los que los hombres no quieren hacer".

La oposición ha reprochado que el Botànic ha aprobado iniciativas sobre las camareras de piso y no las han ejecutado, y en concreto del PP ha considerado que "manipulan" a este colectivo pero "no hacen nada" en su favor, al tiempo ha criticado que este texto ni cuantifica el importe de las ayudas ni dice quién las va a pagar.

Tal como informó EL ESPAÑOL, las Kellys se mostraron decepcionadas por la reforma laboral recientemente aprobada por el Gobierno de España, al no prohibir la externalización de servicios en determinados supuestos en los que la actividad pueda ser desdarrollada por el propio establecimiento (como es el caso de la limpieza de los hoteles). 

En este sentido, las camareras de piso de Benidorm denunciaron que las compañías multiservicio están ofreciendo contratos de fija discontinua por media jornada (20 euros), con un extra de dos euros por cada habitación adicional que se haga.