La Delfin Tower de Benidorm es el último rascacielos de Benidorm. Inaugurado esta misma semana tras cuatro años de construcción, se trata de una torre ubicada en primera línea de la playa de Poniente, con 99 metros de altura, 22 plantas y 39 viviendas. Son los pisos más caros de la capital turística: el precio medio supera los 2 millones de euros, y uno de los apartamentos en la última planta ha rozado los 3 millones. 

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Esta apuesta por el lujo es parte de la forma de comercializar el producto. Hasta el punto de que la promotora que lo ha desarrollado, Goya Real State, ha incluido en los estatutos de la comunidad la prohibición específica del alquiler turístico.

Esto quiere decir que sus pisos solo se pueden arrendar por un periodo mínimo de tres meses, "con el objetivo de evitar molestias" que se pueden producir en edificios donde la compra de viviendas se ve como una inversión a amortizar con alquiler durante la mayor parte del año.

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El resultado: que el 84 % de los apartamentos (33) ya se ha vendido, la mayor parte (70 %) a clientes nacionales. El CEO de Goya Real State, Sergio Vidal, explica que se trata de "una forma de vender el producto, que es un producto de lujo", y destinado a un mercado muy específico "que ha respondido muy bien". 

La Delfin Tower, el edificio con forma de vela en primera línea de playa de Poniente.

Vidal explica que la Delfin Tower es "un edificio contemporáneo, sostenible, más caro de construir pero más barato de disfrutar". Relata que ha sido "algo complicado" terminar en cuatro años ("tres desde que empezamos la construcción") un edificio que supone un nuevo icono para Benidorm, con problemas de suministro de materiales o incluso las inclemencias meteorológicas.

Primer edificio Leed Gold

También destaca la "satisfacción" que supone el haber completado el proyecto con un alto estándar de calidad en las circunstancias actuales: "Por poner un ejemplo, hoy en día nadie se plantea comprar un coche que no tenga unas determinadas calidades o sostenibilidad. Y con las viviendas pasará lo mismo".

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El CEO de Goya Real State se refiere a la certificación Leed Gold que ha recibido la Delfin Tower, el primer edificio de Benidorm en obtenerlo, lo que "avala sus elevados estándares de sostenibilidad en cuanto a eficiencia energética e hídrica, calidad del aire interior, uso de materiales de calidad y apuesta por la innovación y el diseño". También se ha dado una importancia adicional al reciclaje, automatizando el proceso para los propietarios.

Interior de uno de los pisos.

Finalmente, empresario destaca la importancia del simbolismo en el edificio: "En 1963 se inauguró en este suelo el hotel Gran Delfín, el primero de 5 estrellas de la ciudad. En ese momento Benidorm aún era un  pueblo de pescadores, y hemos cogido esa esencia para intentar plasmarla en algunos de los espacios interiores". 

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De hecho, Vidal destaca "el trabajo de Alejandra Pombo y su equipo de interioristas, que aplican su criterio estético con una selección de materiales, elementos y acabados de calidad". El objetivo, resume, es "acercar el concepto de lujo moderno a la venta de pisos en Benidorm".