La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, en Crevillente.

La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, en Crevillente. Moncloa

Economía RECUPERACIÓN

El Gobierno anuncia en Crevillente 100 millones en ayudas para impulsar comunidades energéticas

Los fondos se repartirán en tres programas de ayudas que contribuirán a acelerar la consecución de los objetivos climáticos y la transición energética.

16 septiembre, 2021 16:53
Alicante

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La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha anunciado la activación de 100 millones de euros en subvenciones para impulsar las comunidades energéticas en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR).

Durante la clausura de la jornada "Comunidades energéticas: participación ciudadana en la transición energética", celebrado en Crevillente, ha explicado que los fondos se repartirán en tres programas de ayudas cuyo proceso de audiencia e información pública se abrirá de forma inminente.

Contribuirán a acelerar la consecución de los objetivos climáticos y servirán para catalizar la participación ciudadana en la transición energética, según un comunicado del Ministerio.

"Cada día es más evidente que los ciudadanos y las pymes quieren participar en el modelo energético como lo hacen en otros ámbitos de la sociedad", ha destacado la vicepresidenta, quien ha enfatizado la importancia de las comunidades energéticas locales porque "tienen muchas ventajas y aportan energía de proximidad y beneficios de proximidad".

Además, ha proseguido, rebajan los gastos energéticos de los socios y del ámbito municipal y, al estar cercanas al territorio, conocen sus puntos sensibles y las ventajas que pueden ofrecer, facilitando una buena relación con el entorno.

Las comunidades energéticas permiten desarrollar proyectos impulsados por la población, pymes, cooperativas o entidades locales en ámbitos como las renovables, la eficiencia energética o la movilidad sostenible.

Las personas involucradas en estas comunidades son, a su vez, productoras y consumidoras de su propia energía limpia, lo que redunda en una mayor democratización del sistema energético y en un importante ahorro para el consumidor final, ha incidido Ribera, por lo que constituyen una figura clave en la transición hacia un sistema energético limpio, abierto y participativo. La vicepresidenta ha destacado su papel en el impulso de una transición hacia un modelo rural con energía asequible y sostenible.

Los 100 millones de euros del PRTR movilizados para este plan se repartirán en los programas de gestión centralizada CE-Aprende, CE-Planifica y CEImplementa.

Estas líneas se complementarán con una red de Oficinas de Transformación Comunitarias que, coordinadas por el IDAE y repartidas por todo el territorio, acompañarán y asesorarán a las comunidades energéticas en toda su cadena de desarrollo y facilitarán el acceso a cada línea de ayudas.

CE-Aprende tiene como objeto ayudar a personas físicas u organizaciones interesadas en la constitución de una comunidad energética a familiarizarse con el concepto e identificar futuros socios o miembros.

Subvencionará actuaciones como los gastos asociados a la dinamización, promoción y publicidad de la comunidad.

Por su parte, la segunda línea (CE- Planifica) se orienta al planteamiento y constitución de la comunidad energética en sí misma, y entran en este programa la financiación de estudios y modelos de contrato o la asistencia técnica especializada y el asesoramiento jurídico.

Una vez constituida legalmente, la comunidad energética podrá optar a la financiación de la tercera línea (CE- Implementa), que se articula en régimen de concurrencia competitiva y a través de ella se subvencionarán proyectos integrales y de carácter transversal en el ámbito de la energía renovable eléctrica y térmica, la eficiencia energética o la movilidad eléctrica.

La selección de los proyectos tendrá en cuenta factores como el grado de innovación, los niveles de participación social que haya incorporado la iniciativa, sus beneficios sociales, su contribución a la lucha contra la pobreza energética, la generación de empleo o la perspectiva de género, así como la combinación de distintas actuaciones como el impulso de renovables, la eficiencia energética y la movilidad sostenible.