El Hércules de Alicante ya afila las garras para el partido del sábado ante el Cerdanyola a las 20:30 horas, otro rival ante el que no existen precedentes y ante el que está en juego elevar a cuatro partidos la racha de victorias consecutivas en el Rico Pérez. Al estado de optimismo en el que se ha instalado el equipo alicantino se une otra noticia positiva: la recuperación de Nico Espinosa.

El talentoso extremo alicantino ya tiene el alta para formar parte de la plantilla tras haber dejado atrás una nueva lesión muscular que sufrió durante un entrenamiento. Nico no disputa un partido oficial con el Hércules desde el pasado mes de enero. Tras participar en la remontada ante el Ibiza Islas Pitiusas, el alicantino decidió ponerse en manos del doctor Pedro Luis Ripoll, uno de los grandes especialistas en medicina deportiva, para dar solución definitiva a sus endémicos problemas musculares.

Tras varios meses de rehabilitación, todo parecía solucionado esta pretemporada, en la que llegó a jugar y a marcar, pero un pinchazo durante los instantes finales del entrenamiento, lanzando faltas a portería, hizo saltar las alarmas y activó un protocolo de máxima alerta que se ha prolongado hasta ahora.

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"Nico está recuperado y puede entrar en la convocatoria. Ha entrenado dos semanas completas y está para entrar, puede ser una alternativa muy buena", ha comentado este viernes el entrenador, Rubén Torrecilla sobre el extremo, quien este jueves cumplió 23 años.

Más dudas para este sábado hay sobre el estado de Marcos Mendes, al que el técnico no quiere arriesgar bajo ningún concepto, mientras que el regreso del argentino Agustín Coscia aún se hará esperar. "La semana que viene se meterá con el grupo para hacer rondos. Tiene que hacer ahora una mini pretemporada para ponerse al mismo ritmo y hay que ir tranquilos con él, como hemos hecho con Nico", avisa el técnico, quien no quiso dramatizar con las bajas. "Tenemos gente para jugar arriba", afirma.

Ilusión

El extremeño no está preocupado por el estado de euforia de parte de la afición herculana y precisa, además, que es algo que le gusta "porque quiere decir que se están haciendo las cosas bien". "Me gusta que la gente esté feliz y que se sienta identificada por la forma en la que competimos. Queremos que la gente venga a divertirse con su equipo. Es bueno que haya esa sintonía y que les guste lo que ven", argumenta.

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En relación al Cerdanyola, el entrenador pronostica un encuentro similar al que ha disputado su equipo en las últimas jornadas como local. "Van a intentar que cometamos errores y a sacar partido del balón parado y de las transiciones", aventura Torrecilla, quien pide a sus jugadores estar concentrados y rendir a tope ante un rival "que lo pondrá difícil".

El entrenador no está preocupado por la dinámica de Lleida o Badalona, dos de los rivales directos, y afirma que el Hércules debe centrarse en "seguir ganando y haciendo los deberes". "Tenemos hambre de seguir ganando", ha comentado Torrecilla, quien recuerda que queda mucha Liga y que lo importante es "llegar bien al tramo final".

"Esta Liga es difícil por la dificultad de los campos. Hay que adaptarse de un tipo a otro y el que mejor se aclimate es el que está arriba", sentencia el extremeño, quien confiesa que le gustaría vivir un partido con un marcador amplio en el Rico Pérez para no tener que "sufrir tanto".

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