Sarabia pide ilusión, pasión y positivismo para que el Elche reconquiste el ascenso directo

Ganar al Málaga es lo único que preocupa al Elche a dos días de una jornada determinante en la pelea por el ascenso. A pesar de que el equipo ilicitano no depende de sí mismo, Eder Sarabia, entrenador del equipo ilicitano, pone el foco únicamente en los tres puntos ante el conjunto malacitano.

Los andaluces llegarán al Martínez Valero sin objetivos tras haber cerrado la permanencia la pasada jornada. "El domingo hay que poner la mayor ilusión, pasión y positivismo", asevera el preparador vizcaíno.

No oculta el técnico que, inevitablemente, un ojo y un oído estarán puestos en el duelo entre el Mirandés, segundo, y el Almería, que defiende su plaza en la zona de promoción de ascenso.

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Un tropiezo del conjunto burgalés, inesperado invitado al baile por el ascenso, combinado con el triunfo del Elche, dejaría de nuevo al equipo franjiverde dependiendo de sí mismo y a sólo 90 de Primera.

"Sólo nos centramos en el Málaga", insiste el vizcaíno, que garantiza que la plantilla del Elche, tras un par de días fastidiado por la pérdida del liderato y de su trono en el ascenso directo, llega en un buen estado anímico al partido.

Sarabia detecta "hambre, ganas, ilusión y corazón" en su vestuario y considera que el Elche puede sentirse "privilegiado" por formar parte como protagonista de un espectacular desenlace del campeonato.

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"Hace 25 jornadas, estar aquí lo veíamos casi imposible y hace tres, casi hecho", admite Sarabia, que insiste en que el Elche tiene el ascenso en sus manos a pesar de que depende del Mirandés.

El técnico cree que el Elche, pese a las últimas dos derrotas, no está en dinámica negativa, ya que indica que ha merecido más puntos de los que tiene.

A pesar de centrar casi todo su discurso en el Málaga, el entrenador no obvia el que será el "partidazo" de la jornada en Anduva, donde también jugará su equipo, aunque como convidado de piedra.

Pendientes del transistor

"El Almería no ha sido todo lo regular que le habría gustado ser, pero en este momento y con esos jugadores es capaz de enfocarse", comenta el técnico, que reconoce también el mérito del Mirandés de pelear por el ascenso hasta la última fecha.

"Va a ser una tarde bonita, de transistores y del fútbol que mamamos de pequeños en su máxima expresión e intensidad, con presión e ilusión", explica Sarabia, que no olvida el partido complicado que le espera al Levante, nuevo líder, en Burgos.

"Nosotros necesitamos esa mala leche, el nervio y esos pequeños detalles que te dan un plus. Tiene que notarse que nos la estamos jugando", apostilla.

El rival y el futuro

Eder Sarabia espera un Málaga "sin presión y valiente" y destaca que cuenta con jugadores "con talento, desborde y desparpajo". "Puede ser que no tener presión les beneficie en algunas cosas, pero les perjudique en otras", puntualiza.

"Tienen un gran portero y encajan poco. Quizás el compromiso defensivo es una de las cosas que se pierde cuando consigues el objetivo, pero si yo fuera el Málaga querría ganar y quedar lo más arriba posible", señala el técnico franjiverde, que suma a las bajas ya conocidas de Diaby y Rashani la del sancionado Germán Valera.

En cuanto a su renovación, objetivo del club, tal y como deseó este jueves el propietario, el argentino Christian Bragarnik, el técnico asegura ser feliz en Elche y estar involucrado con la entidad, si bien precisa que en estos momentos sólo piensa en el Málaga.

"Si no pienso ni en el Deportivo, como para pensar en cosas personales. Quiero que esto salga lo mejor posible porque lo siento como mío y como mi casa", afirma.

Sarabia defendió la honradez de los árbitros, pero recuerda que deben "acertar" en sus decisiones en estas jornadas porque hay mucho en juego.

Tal y como sucedió semanas atrás, el vasco no entiende por qué se ha designado a un árbitro de Oviedo, ciudad con un equipo implicado en la pelea por el ascenso, para el VAR. "Hay cosas que podrían controlar un poco más. Así, haga una cosa u otra…", reflexiona.

El entrenador admite que no ha sido justo con varios jugadores de la plantilla, como Rodri Mendoza, ya que merecían más minutos, y confía en que la afición del Elche, aunque sea menos numerosa que en otras ocasiones, siga igual de implicada con su equipo.

"Les digo que confíen en el equipo. Se lo pedí cuando teníamos tres puntos en cuatro jornadas y ahora, con 71, todavía más. Percibo agradecimiento e ilusión. El equipo se ha dejado la piel hasta el final y lo seguirá haciendo", sentencia.