Gema Sala, Chema Galán, Encarnación Hernández y Rafael Moya en una de las salas del Marq con los alumnos de la escuela de verano infantil.

Gema Sala, Chema Galán, Encarnación Hernández y Rafael Moya en una de las salas del Marq con los alumnos de la escuela de verano infantil. M.H.

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Gema lidera en Alicante el premio a la mejor didáctica de un museo en Europa: "Las escuelas no lo entendían"

Los veinte años de trayectoria de esta unidad en el Marq se coronan con el galardón continental y reflejan la evolución en la presentación de contenidos.

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Alicante
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La provincia de Alicante puede presumir de tener en el Marq el mejor museo europeo en proyectos de didáctica, educación y responsabilidad social de Europa. Ahora cumplen los veinte años desde que se abriera esta unidad y Gema Sala valora el cambio de perspectiva logrado cuando inicialmente "las escuelas no lo entendían".

Sala, junto a Chema Galán, Rafael Moya y Encarnación Hernández, forma el equipo clave que ha hecho posible el reconocimiento de la Academia Europea de Museos. Este premio DASA consolida la trayectoria internacional del Marq y la importancia de apostar por estas líneas de divulgación.

Una forma de presentar los contenidos que, dos décadas atrás, costó introducir. Encarnación Hernández explica que a los docentes "les costó asumir" que al pagar la entrada en lugar de ver todo el museo, iban a ver solo una parte.

Ese era precisamente el cambio radical que querían instaurar. Rafael Moya, quien se incorporó en 2007, recuerda cómo las visitas iniciales ofrecían el repaso a la prehistoria, ibero-romano, Edad Media y Contemporánea a los alumnos todo en una sola visita, sin conexión curricular.

La propuesta del equipo del Marq rompía con ello para que el museo sirviera como "complemento al proyecto curricular que tuvieran en el aula". Esto implicaba centrarse en contenidos específicos en una sola sala y adaptarlos por edades.

Este nuevo enfoque permitió que los alumnos pudieran "venir al museo en diferentes años con diferentes contenidos". Chema Galán resume que se le dio a las visitas un "nivel más pedagógico y educativo".

La persistencia del equipo ha sido clave, como señala Gema Sala: "Es mucho tiempo trabajando en el mismo sitio". La continuidad y constancia en los programas han sido un mérito destacado que les hace especiales en el panorama español.

Sala destaca que el Marq es un "bombón" a nivel educativo, ya que fue concebido desde sus inicios para ser "vanguardista y didáctico" y "que la arqueología se pudiera explicar como una ciencia, pero que llegara a todos".

Un ejemplo del éxito de esta trayectoria y de su aceptación es la Escuela de Verano del museo. También iniciada en 2005 como una actividad experimental, al principio "se recibió muy mal" por la idea de que los niños pasaran semanas enteras en el museo.

Hoy, la demanda es tan alta que "en cuanto sale la oferta se suele llenar la primera y la segunda semana", apunta Galán. Los niños que la visitan "van creciendo, empiezan desde los 6 años, terminan a los 12 y los vamos viendo cada año". Incluso, algunos antiguos alumnos ahora forman parte del equipo de monitores del museo.

Si ahora el verano no se entiende sin niños, "futuros visitantes del museo", tampoco se entendería sin la evolución del contenido didáctico del museo, que pasó de "fotocopias" a un "material exquisito", presume Sala. La diseñadora del museo, Lorena Hernández, junto a Rafael Moya, se encarga de que tenga "ese atractivo para el público".

Una audiencia que con los años fue creciendo, y no solo por los números que atraían las grandes exposiciones temporales para las que también se prepararon contenidos específicos. Sala destaca que a partir de 2011 el departamento amplió sus líneas de actuación, sumando la "accesibilidad y responsabilidad social".

Y ahí recuerda Sala que se avanzaron a una tendencia que los museos acuñaron internacionalmente una década más tarde cuando el ICOM añadía en su definición que estos centros deben ser "abiertos al público, accesibles e inclusivos" y "fomentan la diversidad y la sostenibilidad". El Marq, con su enfoque didáctico y social, es un claro ejemplo de esta evolución.

El DASA, recibido en octubre de 2024, precisamente reafirma la visión del museo como una institución al servicio de la sociedad. Ahora este empuje les llevará más lejos. El Marq participará en el congreso The Best in Heritage en Barcelona en octubre de 2025, lo que permitirá "hablar de nuestro programa y que sea más internacionalmente conocido".